El ballet Coppélia se basó en el cuento de E.T.A Hoffmann (Ernst Theodor Amadeus Hoffmann) (Königsberg, Prusia oriental 17761– Berlín, 1822) El hombre de arena. Hoffmann fue escritor, jurista, dibujante y caricaturista, pintor, tenor, y compositor musical prusiano, que participó activamente en el movimiento romántico de la literatura alemana. El misterioso inventor Doctor Coppélius tiene una muñeca danzante de tamaño real, que la coloca tras los cristales de la ventana. Es tan realista que el aldeano Franz se enamora de ella y olvida a su prometida Swanilde, la cual llevada por los celos y descubriendo que Coppélia es una autómata la suplanta. Franz tendrá que enfrentarse a una nueva realidad.
Con esta historia Arthur Saint-Léon construye la coreografía a partir del libreto de ballet de Saint-Léon y Charles Nuitter y con música de Léo Delibes. El estreno se produjo en 1870 en la Ópera de París, y se ha mantenido en el repertorio balletísticos sin interrupción. La coreografía original es la que se ha seguido representando, pero ha habido algunas incursiones novedosas, entre ellas la de Eduardo Lao para la Compañía de Víctor Ullate en el 2006, en la cual «una androide evoluciona a partir de la fibra óptica» (CLICK). AMOR PUESTA A PRUEBA Jean-Christophe Maillot, director de los Ballets de Montecarlo y coreógrafo de esta versión, se aparta también de la coreografía tradicional y crea una versión que titula Coppél – I.A., en la cual la imagen artificial tiene bastante de protagonismo. La idea nació en 2016 y lo que rondaba es crear un ballet en torno a Coppélia.
Me fascinaba la historia de un joven que se enamora de una muñeca mecánica, pero me desanimaba un poco el romanticismo del ballet original. Entonces se me ocurrió revisar la partitura para poder retomar esta obra clásica del repertorio del ballet actualizando la narrativa: una historia de dos prometidos cuyo amor se vería desafiado por la aparición de la inteligencia artificial. Maillot entró en la adaptación con cierto temor de cometer un «sacrilegio» al tener que someter la partitura a ciertos arreglos. Los miedos se fueron disipando gracias a la nueva narración de la historia La inteligencia artificial se ha inmiscuido de tal manera en nuestra vida cotidiana que muchas cosas han perdido su carácter sagrado. Se han vuelto, si no prescindibles, al menos reemplazables sin poner en peligro la supervivencia del mundo. Así, la de Coppélia fue modificada «genéticamente». “En Coppél-i.A., la inteligencia artificial es utilizada como un revelador de nuestras emociones. En mi ballet, todos los personajes aprenden una verdad, agradable o destructiva, pero el que más cosas descubre es innegablemente Coppél-i.A. A diferencia del ballet original que lo convertía en un ser inanimado, Coppél-i.A. es un personaje pleno. Se mezcla con la sociedad, con los humanos, descubre su mundo y llega a sentir las premisas de una forma de amor. LA MÚSICA Bertrand Maillot se ha encargado de esa difícil tarea de alterar la partitura de Leo Delibes, así como de crear música original. Bertrand estudió percusión y piano. Trabajó como percusionista en ensembles y grupos de música clásica, contemporánea y de jazz durante más de una década antes de descubrir la música por ordenador a principios de los años ochenta. Entonces decidió volcar todo su tiempo y energía en componer para teatro y danza. Ha compuesto partituras y bandas sonoras para películas y documentales, y lleva más de una década enseñando música por ordenador en el CMI (Centre Musical Informatique) de París como formador de software Logic Pro de Apple y formador de software Live de Ableton.
Su composición musical en Coppél.i.A. ha seguido la idea de Jean-Christophe Se trataba de coreografiar a partir de una música que pusiera en relieve las emociones de sus personajes al estilo de la música del cine que se pone al servicio de la interpretación y de la trama. Se imponía una partitura híbrida: música original que he compuesto y arreglos musicales de la partitura de Léo Delibes. Ello llevaba a alterar la estructura armónica y su despliegue temporal a través procesamiento de audio e instrumentos virtuales. Terminado, este trabajo fue coreografiado y luego filmado para que los últimos cambios musicales correspondiesen a las emociones deseadas por el coreógrafo y plasmadas en el escenario por los bailarines, ellos mismos sujetos del alma atormentada por Coppélius. LA ESCENOGRAFÍA La versión original de Coppélia consta de tres actos: Primer acto, la plaza de la aldea donde está la casa del doctor Coppelius; Segundo Acto, el interior de la casa de Coppelius donde también tiene su taller de autómatas; Tercer Acto de nuevo la misma plaza de la aldea. La versión de Coppél -i.A. consta de dos actos que representan dos universos diferentes: Primer Acto, el exterior del Forum todo en blanco; Segundo Acto, el taller de Coppélius todo en negro. Aimée Moreni, (París, 1990), la escenógrafa, creció en un entorno artístico. En 2010 ingresó en la Escuela de Artes Decorativas, donde se graduó 6 años después. Su trabajo se basa en investigaciones experimentales y sensibles, a menudo centradas en la luz y el universo mágico que emana de ella. Su trabajo oscila entre la publicidad, exposiciones y artes escénicas. Ha obtenido varias distinciones por su trabajo, como el Premio Icart 2016. En 2018, creó la escenografía y el vestuario de Abstract/Life, de Jean-Christophe Maillot. Su visión escenográfica de Coppél -i.A. aborda dos universos en contraste, blanco y negro, que siguen la línea narrativa emocional y de duda. Para dibujar estos sentimientos molestos, salgo del marco escénico y su caja rectangular. La ambientación del primer acto propone una arquitectura Moviente. Las grandes curvas son como la jaula torácica de la ciudad, y mueven, según Aimée, las acciones. Al fondo del escenario, una membrana en semicírculo materializa la frontera que separa los dos mundos de este ballet. En el segundo acto, los personajes pasan al otro lado, en el estudio de Coppélius. Las bóvedas y las «cabinas» traen un nuevo código estético más oscuro pero esta oscuridad se ilumina gracias a los personajes que se arriesgan a adelantar sus límites físicos y morales. EL VESTUARIO El vestuario lo diseña también Aimée Moreni y varían en cada acto. En el primer acto, la escenografía y el vestuario son monocromos para dar protagonismo a la coreografía y acentuar la legibilidad de las acciones. Para el grupo de invitados (los ancianos), están diseñados con volúmenes sofisticados, en contraste con la ligereza y fluidez de grupo que representa a los jóvenes amigos de Frantz y Swanilda. Aunque pertenecen a estos grupos, los personajes principales se distinguen por diferencias notables, pero nunca ostentosas. La única excepción es, por supuesto, Coppél-i.A. cuya extraña belleza debe llevar a ciertos personajes a transgredir todo tipo de límites. En el segundo acto, los Prototipos, entre silicona y acero, forman un tercer grupo. Son los sirvientes de Coppelius. Coppel-i.A. pertenece a este grupo pero se destaca como una obra maestra casi divina.
FUNCIÓN PRECIO Canje abono 12 espectáculos: 18 € Canje abono 6 espectáculos: 23 € Carné Joven-menores de 25 años, mayores 65, desempleados, personas en ERTE, familia numerosa y Diversidad funcional con grado igual o superior al 33%*:
Título: Coppél – i .A. Coreografía: Jean-Christophe Maillot Intérpretes: (elencos por días) 5 – 20.00 h 6 de enero – 20.30 h 8 de enero – 19.00 h Director: Jean-Christophe Maillot
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