Una Multinacional ofrece un cargo ejecutivo. Quedan cuatro aspirantes, los cuales se someten a la última prueba conjunta de selección. Tendrán que manifestar sus opiniones sobre un planteamiento transmitido a través de un complejo sistema de comunicación. Los aspirantes mostrarán sus habilidades y carencias, su rechazo o su solidaridad entre ellos. Este procedimiento de la empresa termina por convertirse en una lucha donde la astucia, la crueldad y la falta de escrúpulos no tiene límites, para conseguir lo que los cuatro aspirantes habían soñado. Al final un quedará el último.
UN TEXTO CON CATEGORÍA El método Grönholmde Jordi Galcerán se estrenó en mayo de 2002 en catalán, en el Teatre Nacional de Catalunya y posteriormente pasaría al Teatro Poliorama de Barcelona. La dirigía Sergi Belbel y la interpretaban Jordi Díaz, Lluís Soler, Roser Batalla y Jordi Boixaderas. La traducción castellana llegaba en agosto de 2004 a las Jornada de Teatro de Avilés, y un mes más tarde se estrenaba en el Teatro Marquina de Madrid, con la dirección de Tamzin Townsend, interpretada por Carlos Hipólito, Jorge Roelas, Cristina Marcos (en 2007 la sustituye María Pujalte) y Jorge Bosch (sustituido por Eleazar Ortiz). Tres años en cartel, y vino la gira por España. En Madrid siguió el montaje en el Marquina con un nuevo reparto: Juan Codina, Francesc Albiol, Toni Acosta y Rafael Castejón. Ahora, en 2021 vuelve con la dirección también de Tamzin Townsend y la producción de Pedro Larrañaga. Es la segunda temporada. La primera temporada quedó interrumpida por el COVID 19. Estrenamos a finales de enero de 2020 y seguimos en febrero con el teatro lleno y en marzo se detuvo todo – confirma Luis Merlo (Madrid, 1966) que interpreta al personaje de Fernando.
FERNANDO UN LOBO DISPUESTO A TODO
Fernando es un personaje, según Luis, diferente a los otros tres aspirantes Es un lobo. Al ser la última prueba para acceder a un puesto, tiene que eliminar a los otros tres candidatos. Hace todo, todo por eliminarlos, lo que pasa es que descubrimos, a lo largo de las pruebas de esta Multinacional, que plantea el autor Jordi Galcerán, son cómicas e hilarantes, con lo cual Fernando se pregunta que para acceder a una Multinacional. ¿A qué viene esto? Luego resulta que todo es una mentira sobre una mentira. Eso hace que el público disfrute muchísimo con los saltos argumentales y las trampas que tiene muy bien urdidas de que lo que acaba de suceder, de repente, se convierte en una mentira, pero vamos a otra verdad y, de repente, esa verdad puede convertirse en otra mentira. De ahí que el público disfrute mucho y su éxito internacional. ME QUEDÉ CORTO EN MI COMEDIA A primera vista puede parecer que la comedia tiene un buen punto de exageración en lo referente a las pruebas que se proponen. No obstante el propio Jordi Galderán (Barcelona, 1964), a lo largo de estos casi 18 años de recorrido ha recibido informaciones de sus amigos y conocidos y le ha llevado a afirmar me quedé corto en mi comedia. Los retorcidos juegos a los que los psicólogos de mi ficticia empresa sometían a los aspirantes eran menudencias comparados con algunas anécdotas reales. El fondo, sin embargo, era el mismo. ¿Hasta dónde estamos dispuestos a llegar para conseguir el trabajo de nuestros sueños? ¿Dónde están nuestros límites cuando la recompensa es lo suficientemente alta? Aquí nos reímos de ellos, sentimos su ridículo, pensamos que nosotros nunca llegaríamos a esos extremos, pero… Esos extremos se encuentran en la realidad Una amiga muy sensata que optaba a un puesto de dependienta en una zapatería me contó que en mitad de la entrevista el encargado le dijo que si quería el trabajo se volviera de espaldas y rezara en voz alta un Padrenuestro. Así, sin más. Mi amiga me confesó que necesitaba el trabajo, que el Padrenuestro se lo sabía y, después de pensarlo un par de segundos, se levantó, se volvió y lo rezó. ¿Usted qué hubiera hecho? EL MÉTODO GRÖNHOLM
Estamos acostumbrados a la muletilla «esta historia está basada en hechos reales«, pues según Jordi, su obra también lo está. nació de una anécdota real. En una papelera, un periodista encontró casualmente las fichas desechadas de unas aspirantes a cajera de supermercado. En ellas, el encargado de las entrevistas había anotado sus impresiones sobre cada candidata. El periodista hizo un reportaje sobre ello y transcribió algunos de sus apuntes. Eran del tipo “ésta no, por gorda”, “moraca, no sabe ni dar la mano”, “apesta”, etcétera. La noticia me llevó a pensar en la relación que se establece entre alguien que necesita un trabajo y aquél que tiene el poder de proporcionárselo. Una situación en la que el aspirante intenta mostrar su mejor cara, o al menos la cara que cree que se espera de él, y el entrevistador intenta descubrir a quien tiene delante y si es el tipo de persona que necesita. Es un situación en la que la mayoría de los mortales nos hemos visto implicados. Esto parece ser la causa de su éxito internacional. Todos nos sentimos identificados con los dilemas por los que transcurren los personajes, nos ponemos en su lugar y en el fondo dudamos de hasta dónde podríamos llegar si la recompensa es lo suficientemente alta. Por cierto, a aquel entrevistador del supermercado, después del reportaje, lo despidieron por falta de ética, pero si en lugar de haber escrito “ésta no, por gorda”, hubiera anotado “el perfil de la candidata no se ajusta al puesto” no hubiera habido noticia y no habría pasado nada, aunque la realidad continuara siendo la misma, que no la cogía por gorda. LOS «CASTINGS» REFLEJO Como cualquier actor Luis Merlo ha tenido que presentarse – no sé si sufrir – los llamados «castings«, para mostrar sus cualidades o ver si se adecúa al personaje. El sistema parece no estar muy lejos de lo que se refleja en esta obra. Los «castings» son ese reflejo y pueden ser la cosa más lógica y coherente del mundo. Cuando era joven yo me he sometido con alegría para conseguir trabajar. Entonces las situaciones eran tan hilarantes como las que obliga a someterse esta Multinacional a los cuatro candidatos. En la obra de Jordi Galcerán se alude cierta crueldad por parte del entrevistador. Existe esa crueldad, lo que pasa es que está latente y a veces se lleva a cabo, pero, en la función, Jordi insiste en que quiere que el público se divierta con sus funciones. Que lo pase bien. Entonces cuando ya está puesto en marcha el proyecto del actor de contar el cuento a gente que viene al teatro pagando para escuchar una mentira que se hace verdad es poderosísima, y yo durante este tiempo de Pandemia la he echado muchísimo de menos. El decidirse a montar de nuevo El método Grönholm, es cumplir con un deseo de Luis Merlo de hace años Es un texto que me fascinó siempre. Es un texto que se ha convertido en un clásico contemporáneo. Es una obra que se sigue haciendo y se sigue haciendo y se seguirá haciendo siempre porque siempre estará de actualidad. Luis Merlo vuelve en la nueva temporada de la alocada y divertida serie La que se avecina. Sí, es una serie completamente loca y necesaria.
FUNCIÓN Funciones extra el 11 y 12 de octubre. PRECIO
Título: El método Grönholm
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