
BLAUBEEREN
Texto: M. KAUFMAN & A. GRONICH
Director
SERGIO PERIS-MENCHETA
Intérpretes
VÍCTOR CLAVIJO / CLARA ALVARADO / ERIC DE LOIZAGA /
NACHO LÓPEZ / IRENE MAQUIEIRA / NATXO NÚÑEZ /
MARÍA PASCUAL / PALOMA PORCEL.
en los
TEATROS del CANAL
(SALA VERDE)
de
MADRID
Del 5 al 29 de junio de 2025
– Blaubeeren de Moisés Kaufman y Amanda Gronich, se construye a partir de un álbum de fotografías, inédito hasta el 2007, refleja la vida de los nazis que trabajaron en el campo de exterminio de Auschwitz.
– Sergio Peris-Mencheta, que vuelve a la escena después de un largo período de enfermedad en la que recibió un trasplante de médula contra la leucemia, dirige esta obra encuadrada en el llamado teatro documental, interpretada por Víctor Clavijo, Clara Alvarado, Eric de Loizaga, Nacho López, Irene Maquieira, Natxo Núñez, María Pascual y Paloma Porcel.

Karl Hoecker, último ayudante del comandante de Auschwitz-Birkenau, poseía un álbum con 116 fotografías que plasman la vida cotidiana de los nazis en el campo de concentración de Auschwitz: visitas, ceremonias oficiales, actividades sociales, momentos de descanso en que hombres y mujeres toman el sol, se divierten…Al publicarse en varias revistas un empresario reconoció en ellas a su abuelo. Al investigar sobre ese hallazgo tuvo que enfrentarse con el pasado de su familia, así como conoció a otros descendientes de nazis.

FOTOS: JAVIER TOLOSA
Un inédito álbum con 116 fotos de la Segunda Guerra Mundial, fueron enviadas a Rebecca Erbelding, la directora de archivos del Museo del Holocausto de los Estados Unidos, en el 2009. Rebecca, cuanto más se interna en ese material fotográfico surge una historia y la consecuente pregunta: ¿cómo se vive una vida cotidiana al lado de un campo de exterminio? Las fotos se publican en las primeras páginas de los periódicos del mundo. Un empresario reconoce a su abuelo en una de ellas, ello le plantea el tenerse que enfrentarse con el pasado de su familia y con otros descendientes de nazis. Allí había una historia que tardo en reconstruirse cuatro años a partir de entrevistas, investigaciones y una visita a Auschwitz-Birkenau y Solahutte. La originalidad de esta historia sobre el Holocausto radicaba en lo que manifiesta Kaufman, descendiente de sobrevivientes del Holocausto y uno de los autores del texto: “Una cosa es cometer una violencia indescriptible contra un pueblo. Otra muy distinta es marcar las matanzas en masa con canciones casuales y picnics despreocupados al aire libre” Esto le llevó a escribir la obra.Blaubeeren (The Album, o Here There Are Blueberries) está escrito por Moisés Kaufman y Amanda Gronich
MOISÉS KAUFFMAN, dramaturgo y director
Moisés Kaufman es un destacado director y dramaturgo nominado al premio Tony y al Emmy, reconocido por su labor como cofundador y director artístico de Tectonic Theatre Project. Para Kaufman este álbum, bautizado como Álbum Karl Hoecker, por ser dueño de él, le llevó a la urgencia de escribir una obra, en la que empleó cuatro años a partir de entrevistas, investigaciones y una visita a Auschwitz-Birkenau y Solahutte. Era volver una vez más a revisar las generaciones pasadas, pero Kaufman lo veía justificado:
Si nos apoyamos en las generaciones que nos precedieron, viviendo y beneficiándonos de un sistema injusto que ellos construyeron, ¿qué responsabilidad tenemos, como individuos y como sociedad, de corregir tantos errores? Quiero llevar esta obra a la audiencia más amplia posible para que podamos aprender a reconocer este conflicto en nosotros mismos, examinar nuestras propias elecciones, lidiar con nuestro pasado compartido y reimaginar nuestro futuro colectivo. Este es un momento en el que reconocemos colectivamente nuevas olas de supremacía blanca, su insidiosa capacidad de impregnar nuestra vida diaria y sus consecuencias históricas. La nueva obra de Tectonic: The Album, or Here There Are Blueberries es una exploración rigurosa de la vida cotidiana de algunos de los supremacistas blancos más notorios.

Kaufman ve el escenario como una plataforma perfecta
para explorar este ajuste de cuentas con una historia violenta y terrible. Como descendiente de sobrevivientes del Holocausto, las instantáneas casuales del álbum de Karl Hocker, los selfies de 1944, me desconciertan. Una cosa es cometer una violencia indescriptible contra un pueblo. Otra muy distinta es marcar las matanzas en masa con canciones casuales y picnics despreocupados al aire libre.
“The Album, or Here There Are Blueberries” es una obra escrita a cuatro manos. Esa segunda mano se llama Amanda Gronich una dramaturga merecedora del premio Emmy gracias a su carrera dedicada a llevar historias reales a los escenarios y pantallas.
SERGIO PERIS-MANCHETA, actor, dramaturgo y director
EL ÁLBUM DE LAS 116 FOTOGRAFÍAS
SON EL PROTAGONISTA,
NO HAY UN PERSONAJE POR ENCIMA DE OTRO
Sergio Peris-Mencheta, de consolidada dirección teatral, se siente impactado por la obra de Kaufman,por lo que plantea y cómo lo plantea. Por otro lado, deseaba, después de 14.4 (Catorce.cuatro), volver al teatro documento y volver a contactar con la historia del siglo XX, porque son dos tratamientos que le encanta. Decide montarla a través de su Compañía Barco pirata.
Es una obra que, principalmente, habla de la memoria, que es algo que me toca de cerca, y siempre que puedo rescato ese tema, como tema nuclear de este país, que hasta que no solucionemos nuestros problemas con la memoria no vamos a hacer las paces con nosotros mismos. El álbum de las 116 fotografías son el protagonista, no hay un personaje por encima de otro. Con el equipo del Museo del Holocausto vamos a ir desentrañando lo que son estas fotografías, quiénes son los que están y por qué se hicieron estas fotografías en algunos casos: ¿qué celebran? ¿por qué estaban paseando?… Me pareció muy interesante imaginar lo que no estaba en cada una de las 116 instantáneas, ¿qué pasó justo antes?, ¿qué pasó después?, ¿quién tiró la foto?, ¿qué estaba fuera del cuadro?…

EL ÁLBUM DE FOTOGRAFÍAS KARL HOECKER.
NO HAY PRISIONEROS, SOLO GENTE TRABAJANDO
Lo que llama la atención del álbum Karl Hoecker es que no vemos a ningún prisionero, sino solamente a gente que trabaja en el campo de concentración, tantos los trabajadores intermedios, lo que trabajan en lo más básico, hasta los altos mandos.
Lo más llamativo es que estas 116 fotografías parecen estar sacadas en un campo de vacaciones, más que en Auschwitz. Esto me sorprendió mucho y me pareció una historia necesaria, para acercarnos a la banalidad del mal y, sobre todo, a poder conectar con el mundo tal y como lo vivimos ahora mismo, donde estamos asistiendo en tiempo real a un genocidio. Lo que no imaginamos es que lo que sucede fuera tan coetáneo con lo que está pasando ahora mismo. La gran diferencia es que el genocidio de Auschwitz se descubrió después, a toro pasado. Los propios nazis trataron de esconder todo lo que estaba pasando en los campos de concentración, especialmente en Auschwitz. Aquí en cambio no. Todos los telediarios están poniendo imágenes de hace unas horas de la franja de Gaza. Entonces tenía sentido porque no sabíamos, pero, a día de hoy, estamos viendo gobiernos cómo miran para otro lado y están muriendo miles y miles de niños.

FOTOS -VIDEO: PRENSA TEATROS del CANAL
La función dura 85 minutos en los que continuamente suceden cosas. Sergio lo parangona a
Una especie de “thriller” que el espectador vive en primera persona porque él mismo va descubriendo las fotos y sigue los pasos de los archivistas del Museo. Es muy entretenida de ver y de entender. Es muy interesante de ver porque, de algún modo, entendemos a estos monstruos en su lado más humano. Me interesaba indagar. Cuando me meto en una obra de teatro, aunque sea un tema que conozca más o menos, es un pretexto para poder indagar, en este caso sobre Auschwitz, sobre el Holocausto, sobre nuestros abuelos, nuestras abuelas.
CLARA ALVARADO, actriz, cantante y enfermera
ME HA COSTADO QUERERLA, ENTENDERLA COMO HUMANA
Clara Alvarado Bermudo (Navalmoral de la Mata, Cáceres, 2 de julio de 1990) es actriz de cine, teatro y televisión, cantante y enfermera. En “Blaubeeren” interpreta a Melita Maschmann, el personaje protagonista.
Su rol, de una forma u otra, es que la gente intente entender y por qué hicieron lo que hicieron. Es un personaje clave porque es necesario que empaticemos con él, pese a que es difícil. Construir este personaje ha sido un reto, porque me ha costado mucho no juzgarlo. Como persona, como humana, juzgo lo que hizo. No me gustaría haber sido ella. Sin embargo, nadie está exento del mal. Me ha costado quererla, entenderla como humana, y, a mí personalmente como actriz, no caer en el buenismo, en complacer, sino en contar con verdad, con frialdad y de manera aseverativa, como me decía Sergio.

FOTOS: JAVIER TOLOSA
Ante este material tan original en cuanto a la procedencia y con tanta información, Clara lo considera
Un regalo. Ha sido duro porque he conocido más en profundidad todo lo relativo al Holocausto, y me he documentado. He visto muchas películas de la época, he leído libros de “Primo Levi”, “El Diario de Ana Frank”.Hay muchas referencias e la época nazi y de la segunda guerra mundial, pero cuando te toca interpretar a una de las personas reales de las que estuvieron allí, es necesario ese plus de documentación para poder indagar, para poder conectar, para poder defender el personaje desde un lugar de verdad. Te preguntas ¿cómo es posible que esto sucediese y que esas personas fuesen como tú y como yo? Eso es lo más fuerte de todo. Podrías haber sido tu y haber si yo. En cambio, miras hacia otro lado. ¿Qué hubieras hecho tú en ese lugar? Entonces indagar en la historia de lo que sucedió, te hace abrir los ojos aún más, y sentir que forma parte de uno mismo y no de la historia. Al final, la historia somos nosotros, son nuestro pasado. Somos quienes somos como humanidad por los procesos históricos que hemos vivido. Entonces hay partes de uno mismo con las que hemos conectado todos. Sigue siendo importante contar historias como ésta, para no olvidar. Cuando uno no recuerda es cuando las cosas se olvidan del todo. Olvidar es negar una parte de la historia. Hay que recordarlo, ponerle nombre y gestionar lo mejor que podamos. No hay que flagelarse, pero en tu día a día puedes mejorar un poco. Llevártelo a tu vida personal y nos relacionemos de una forma más sana, más humana, más real, más afable, menos violenta, menos criticona. Se puede extrapolar a la vida cotidiana y es necesario y es necesario no olvidar. El no olvidar es algo que todos los compañeros tenemos al salir al escenario. Somos muy conscientes del mensaje que queremos transmitir y somos vehículos de un mensaje, no estamos como actores para que se nos vean. Somos vehículos conductores de una historia, y la concentración que se palpa en la Compañía, entre bambalinas, en plena función y previamente es maravillosa porque hemos conformado un elenco muy chulo.
CREACIÓN COLECTIVA
Ha habido un proceso de creación colectiva en cuanto que ha habido mucha libertad y en la gran disponibilidad de Sergio Peris-Mencheta
Fue muy receptivo a todo lo que íbamos sugiriendo en los ensayos. Hemos disfrutado mucho, y creo que él también porque venía con una disposición de disfrute. Quizá ha sido uno de los proyectos en donde ha dado menos notas de dirección. Cada nota que nos daba era como una joya a la que nos agarrábamos para seguir trabajando en esa dirección y todos hemos encontrado algo.
El resultado ha sido la creación de personajes que Clara describe como
bastante armados, muy formados, bien definidos. Es una dirección sublime como todo lo que hace Sergio, que es un genio. El público va a salir removido hacia diferentes lugares y, sobre todo, con ganas de hablar, pero pasado un tiempo. Invita al debate.

FOTOS: JAVIER TOLOSA
VÍCTOR CLAVIJO, actor y fotógrafo
KARL HOECKER UN TIPO GRIS AL QUE
LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL
LE VINO MUY BIEN PARA ASCENDER
Víctor Clavijo Cobos (Algeciras, Cádiz, 1973), actor y fotógrafo español, inició la carrera de Derecho en Granada, pero la abandonó y con veinte años se marchó a Madrid para estudiar en la RESAD (Real Escuela Superior de Arte Dramático), graduándose en 1997), que compaginó con el doblaje canto, danza y esgrima. Ha ganado el Premio de la Unión de Actores en seis ocasiones, por su trabajo en televisión, cine y teatro. También el Premio Ondas Globales del Podcast Mejor Actor 2024, por Recursos Humanos. Víctor Clavijo interpreta a Karl Hoecker, el más importante de todos los personajes que encarna. Es el dueño del álbum del campo fotografías que se tomaron en Auschwitz, y en aquel momento era el asistente del último comandante en jefe de Auschwitz.
Era un nazi de origen, más o menos, humilde, pero fue ascendiendo en el escalafón y socialmente. Antes de militar en el partido nazi, era contable. Uno del montón como muchos de los que acabaron gobernando estos campos de exterminio. El hecho de tener un puesto de responsabilidad les venía muy bien a ellos. Karl Hoecker era un tipo muy gris, muy corriente, al que la segunda guerra mundial le vino muy bien para ascender a todos los niveles.

FOTOS: JAVIER TOLOSA
De este personaje se tienen fotografías del campo de concentración e imágenes de video de los años 80, 90 durante su juicio, pero no lo conoce el gran público. Ello proporciona cierta libertaD a la hora de construir el personaje.
Te da un cierto margen a la hora de crearlo, pero acotándolo por la credibilidad, por lo que la historia demanda y por el propio guion. Ha sido un proceso interesante meterse en la cabeza de alguien así, que, aunque al final de su vida no negó su participación en el Holocausto, negó que supiese algo sobre el exterminio. Decía que no se había enterado de lo que estaba pasando. Entonces metiéndote en la cabeza de alguien que hasta que punto está mintiendo o se está justificando, pues es muy interesante
SIEMPRE ME LLAMÓ MUCHO LA ATENCIÓN
QUÉ PASABA POR AQUELLAS CABEZAS
DE LOS ALEMANES EN LOS AÑOS CUARENTA
El material informativo al que Víctor y sus compañeros se han enfrentado lo califica de “muy potente y por lo tanto muy interesante”. Un material extraído de la historia, no hay que olvidar que es “teatro documento”, disciplina que le atrae de forma espacial a Víctor
Me atrae la historia y sobre todo la historia de la segunda guerra mundial y la historia del Holocausto. Hace unos años hice un viaje por Centroeuropa visitando algunos de los lugares que tristemente tuvieron un protagonismo en esta historia, Gdansk (Danzig), Munich, Varsovia, Auschwitz…y entonces trabajar con este material histórico ha sido muy interesante porque, ya, conocía de antemano algo ya hora ha sido una oportunidad para intentar encarnar a estas personas que representan un poco la banalidad del mal. Gente que ha participado en una gran matanza, pero que no se sentía responsable, aunque otros creían en lo que estaban haciendo. Siempre me llamó mucho la atención qué pasaba por aquellas cabezas de los alemanes en los años cuarenta. Tener la ocasión de intentar encarnar eso y ponerse en los zapatos de del personaje, aunque no comprender, es muy interesante desde el punto de vista actoral

ES UN MECANISMO DE RELOJERÍA
CON UNA PRECISIÓN ABSOLUTA
Para Víctor, Sergio Peris-Mencheta es una amistad de 25 años. Ha trabajado con él en “Lehman Trilogy” (click), y ahora en este proyecto que ni siquiera lo leyó confiando en la destreza de Sergio.
Tengo una fe ciega absoluta y una admiración absoluta hacia Sergio, aparte de lo mucho que lo quiero a nivel personal. Lo admiro tanto a nivel artístico que sabía que hiciera lo que hiciera iba a ser una maravilla. Siempre que me llame me voy a poner a sus órdenes encantado. Ha sido un proceso muy creativo, pero, sobre todo, muy práctico, porque ya tenía la función montada en su cabeza, desde hace meses. Tenía la película rodada, con lo cual vas a ensayar a tiro hecho. Te dice, más o menos, todo lo que tienes que hacer, pero marca todo lo que tiene que ocurrir en el escenario. Es un mecanismo de relojería con una precisión absoluta, muy difícil de pillar al principio, pero una vez que lo pillas es maravilloso porque es montarte en la tabla y dejar que la ola te lleve. En este caso ha sido la ocasión, dicha por él, en la que menos notas ha dado a los actores, porque tenía muy claro lo que quería desde un principio. Vio que le dimos lo que él tenía en su cabeza y la función la montó en una semana. Hemos hecho 40 pases antes de estrenar, que esto es una cosa, aparentemente, loca. No me ha pasado nunca y, probablemente, a muy poca gente le habrá pasado.
ENSAYAR CON LA ESCENOGRFÍA
DESDE EL DÍA UNO, UN LUJO
Una de las ventajas ha sido el poder ensayar con la escenografía desde el día uno.
Eso es un lujo, y eso ha permitido que la función esté muy engrasada, cosa que necesita porque es muy complicado al era un mecanismo de relojería tanto técnico como artístico. Los técnicos tienen que estar muy coordinados con la parte artística y viceversa. Ha sido muy gozoso, porque Sergio da libertad artística, pero, al mismo tiempo, te tienes que acoplar un mecanismo de relojería absolutamente preciso.
A nivel de compañeros, todo son parabienes por parte de Víctor, aunque era la primera vez que compartía escenario con ellos.
Creo que todos estamos enamorados del resto de la Compañía a todos los niveles. Es un grupo muy divertido, pero, al mismo tiempo, muy profesional y muy generoso, que es lo más importante.

BLAUBEEREN ES OBRA INCÓMODA
“Blaubeeren”, amén de ser un relato histórico, entra en es mundo de la Memoria Histórica, al obligar a la gente a recordar, algo que Víctor valora mucho:
Recordarle a la gente de lo que es capaz el ser humano, de lo mejor y lo peor, en este caso el Holocausto fue un bue ejemplo de lo peor que es capaz el ser humano. Recordarlo continuamente es importante para que salten las alarmas cuando veamos los síntomas como sociedad, de que corremos el riesgo de ir hacia el mismo lugar al que se fue entonces. De hecho, está ocurriendo ahora básicamente. “Blaubeeren”, de alguna manera, plantea al espectador preguntas muy incómodas. Entre otras ¿qué habría hecho uno mismo como espectador si le hubiese tocado vivir en esa Alemania de los años treinta/cuarenta? Habría sigo seguramente cómplice por omisión o por acción de ese genocidio. Es una obra que plantea preguntas, pero también consigue hacer entender un poco qué serie de circunstancias se dieron para que se llegase a cometer ese horror, y cómo estaba compartimentado el trabajo de manera de que cada uno de los que participaban en esta cadena de crímenes no se sintieran responsables. Es una obra incómoda que plantea preguntas y, por desgracia, por lo que estamos viviendo estos días, muy actual

MOISÉS KAUFMAN, dramaturgo, director
Moisés Kaufman es un destacado director y dramaturgo nominado al premio Tony y al Emmy, reconocido por su labor como cofundador y director artístico de Tectonic Theatre Project. Entre sus múltiples títulos en Broadway se incluyen “Paradise Square” (con 10 nominaciones al Tony), “Torch Song” de Harvey Fierstein, “Bengal Tiger at the Baghdad Zoo” con Robin Williams, “The Heiress” con Jessica Chastain, “33 Variations” con Jane Fonda (por la cual fue nominado al Tony como Mejor Obra), e “I Am My Own Wife” de Doug Wright (Premios Obie y Tony).
Kauffman también ha escrito y dirigido numerosas obras de teatro, incluyendo “Las Aventuras de Juan Planchard”, “Here There Are Blueberries” (como coautor), “Seven Deadly Sins” (ganador del DramaDesk Award Unique Theatrical Experience), “Tennessee Williams’ One Arm”, “The Laramie Project” (click), “The Laramie Project: Diez años después”,y “Gross Indecency: Los tres juicios de Oscar Wilde” (click) (ganador del Premio Lucille Lortel a la Mejor Obra y del Premio Outer Critics Circle). Además, Kaufman coescribió y dirigió la adaptación de HBO Films de “The Laramie Project”, la cual recibió nominaciones al Emmy a Mejor Película para Televisión y Mejor Guión, al National Board of Review y al Premio Humanitas. También es miembro del Guggenheim en Dramaturgia y recibió la Medalla Nacional de las Artes en 2015 del presidente Barack Obama.

FOTOS: ARCHIVO BARCO PIRATA
AMANDA GRONICH, dramaturga
Amanda Gronich ha sido merecedora del premio Emmy gracias a su carrera dedicada a llevar historias reales a los escenarios y pantallas. Además de ser miembro fundador del Proyecto Teatro Tectónico, co-creó El Proyecto Laramie, que más tarde fue adaptado en una película para HBO. También dirigió la producción de la compañía en Toronto de «Gross Indecency: Los tres juicios de Oscar Wilde« (click). En Tectonic, Amanda co-escribió «Aquí Están Arándanos» (La Jolla Playhouse, Compañía de Teatro Shakespeare DC, New York Taller de Teatro 2024). Aparte de su trabajo en el teatro, Amanda ha tenido una carrera en televisión documental de más de diez años. Fue guionista principal de la serie ganadora de un premio Nacional Geographic Television. Antes de eso, Amanda fue la escritora senior supervisora en Hoff Productions, donde supervisó a todo el personal de escritores. En este cargo, creó y escribió series y especiales de alto nivel para diversas cadenas de transmisión nacionales, incluyendo National Geographic, Animal Planet, WeTV, Travel Channel y TLC. Amanda también es profesora adjunta del Programa de Posgrado en Teatro Educativo de la Ciudad Colegio de Nueva York. Su libro sobre sus métodos de trabajo en la creación de obras originales será publicado por la Southern Press de la Universidad de Illinois.
FUNCIÓN
De martes a sábados: 19:30 h
Domingos: 18:00 h
Encuentro con el público
6 y 12 de junio, después de la función
PRECIO
Platea: 30 €
1ª balconada: 25 €
2ª balconada (visibilidad Limitada o lateral): 9 €
Descuentos
Carné Joven-menores de 25 años, mayores 65, desempleados, personas en ERTE, familia numerosa y Diversidad funcional con grado igual o superior al 33%*: 25 €/ 20 €.
Carné Bibliotecas Comunidad de Madrid*: 10% de descuento sobre tarifa general.
Asociaciones* (solo en taquilla): 25 €/ 20 €.
*Una localidad por carné. Necesaria acreditación.
Entrada gratuita para ACOMPAÑANTE: para personas con Movilidad Reducida
Título: Blaubeeren
Teatro
País: España
Idioma: español
Texto: Moisés Kaufman y Amanda Gronich
Diseño de escenografía: Alessio Meloni (AAPEE)
Diseño de iluminación: Pedro Yagüe
Diseño de vestuario: Elda Noriega (AAPEE)
Diseño de sonido: Benigno Moreno
Diseño de audiovisuales: Emilio Valenzuela
Composición musical: Joan Miquel Pérez
Atrezista: Eva Ramón
Dirección de producción y producción ejecutiva: Nuria-Cruz Moreno
Ayudante de dirección: Javier Tolosa
Ayudante de vestuario: Paula Fecker
Adjunto dirección de producción: Fabián Ojeda Villafuerte
Jefa de producción y regiduría: Blanca Serrano
Gerente en gira y regiduría: Paco Flor
Auxiliar de producción: Elena Prados
Administración: Henar Hernández
Asistente de gerencia: Jennifer Alonso
Dirección técnica: Alberto Hernández de las Heras
Técnico de luces: David González y Juan Andrés Morales
Técnico de maquinaria: Juan Moscoso, Paul Jara y David González
Técnico de sonido: Pablo de la Huerga y Benigno Moreno
Técnico de vídeo: Juan Ignacio Arteagabeitia
Jefa de prensa: María Díaz
Fotografía de cartel: Sergio Parra
Fotografía de escena: Javier Tolosa
Diseño gráfico: Eva Ramón
Distribución: Producciones Teatrales Contemporáneas
Una producción de Barco Pirata en coproducción con Producciones Teatrales Contemporáneas
Agradecimientos: Teatro Municipal de Coslada
Here There are Blueberries fue originalmente encargada y desarrollada por Tectonic Theatre Project Moisés Kaufman, director artístico y Matt Joslyn, director ejecutivo
Intérpretes: Clara Alvarado (clarinete y piano), Víctor Clavijo (piano), Eric de Loizaga (trikitixia), Nacho López (guitarra), Irene Maquieira (viola), Natxo Núñez (piano, guitarra y flauta), Maria Pascual (piano), Paloma Porcel (ukelele)
Dirección: Sergio Peris-Mencheta
Duración: 1 h 25 min
Estreno en Madrid: Teatros del Canal (Sala Verde), 6 – VI – 2025

Copyrigth diazsande
TEATROS del CANAL
(SALA VERDE))
c/ Cea Bermúdez, 1, Chamberí
280003 – Madrid
Tf. 913 08 99 99
Metro: L. 2, L.7
Bus: 3, 37, 149