El viejo Lear quiso conocer el grado de afecto de sus tres hijas para designar sucesora a quien más le quisiera. Dos se deshicieron en halagos y la menor le contestó que le quería como padre y nada más. Le pareció poco al rey, que la castigó. El tiempo y las peripecias vendrían a demostrar más tarde que era la única digna del trono que, por fin, tras una guerra con las hermanas, consiguió. Este es el cuento popular en la tradición de la Inglaterra del siglo XII. Ricardo Iniesta, autor de la dramaturgia y director del montaje precisa: Shakespeare amplía y transforma la trama, infundiéndole una visión personal. Paralelamente a la propia historia de Lear plasma la de Gloucester y sus hijos. El resultado supone una experiencia extrema de dolor, locura y destrucción expresada crudamente y sin reservas. UN REY LEAR SIN MUTILAR
El Rey Lear que llega al Teatro Fernán Gómez, es la última producción del Teatro Atalaya. Lleva en gira poco más de 12 meses y durante este tiempo ha recibido 12 galardones, con lo cual es el espectáculo más premiado de los 24 que montado Atalaya, desde 1983. Por lo países donde ha pasado el público y los críticos lo han recibido con gran entusiasmo. Según Ricardo Iniesta Rey Lear habla de una revolución humanista y considera que es el mejor espectáculo de Atalaya, lo cual es lógico una vez que es el mejor texto de teatro universal de todos los tiempos. Lo he constatado con muchos especialista en Shakespeare. Se habla mucho de Hamlet, mucho de Macbeth pero hay que pensar que Rey Lear estuvo hasta principios del siglo XX no sólo censurado sino mutilado. Le quitaron toda la última parte para hacer un final feliz; quitaron personajes como el Bufón que es personaje fundamental pues pone en cuestión a la Iglesia, al Poder. El Bufón va concienciando a Lear, y, de hecho, algunos especialistas comentan que el Bufón desaparece porque es el Loco de la obra y cuando Lear entra en la locura, ya coge su personaje. Nosotros no. Hemos querido mantener hasta el final al Bufón como conciencia crítica de la obra. LENGUAJE HUMANISTA EN EL REY LEAR Lear posee también, según Ricardo, ese existencialismo de Hamlet, la lucha por el poder de Macbet, la crueldad de Titus Andrónicus, pero subraya una diferencia fundamental: el Humanismo.
Ese humanismo le da mayor proyección. De las tragedias de Shakespeare, ésta es la ultima que Shakespeare escribió y reúne todo lo que tiene Shakespeare, para proyectarnos un nuevo lenguaje: el humanista. Ese lenguaje humanista es lo que lo hace tan contemporáneo y tan actual. De ahí que este montaje es lo que yo llamo un «montaje híbrido», como los coches híbridos. Por un lado tiene lo clásico, porque para nosotros es fundamental conservar la esencia de Shakespeare. No hemos añadido ni una palabra, ni hemos quitado textos esenciales, aunque hemos quitado gran parte del texto, porque de lo contario el texto duraría cuatro horas y media. Dura una hora y cuarenta minutos. Hemos quitado lo que no era imprescindible. Son veintitantas mil palaras y las hemos dejado en 11.000. PEINAR CADA PALABRA Y Ese corte, además de la necesidad de reducir el tiempo del espectáculo viene motivado por el mantener la esencia. Lo que hemos mantenido como esencial es el verso yámbico. Para nosotros quitarle el verso, quitarle el pentámetro y, sobre todo, la musicalidad a Shakespeare es como quitarle el color a Van Gogh. Si pones La noche estrellada, Su habitación, Los Lirios, El campo de trigo … de Van Gogh en blanco y negro, ¡menudo plan! Algo similares Shakespeare cuando se le quita pentámetro yámbico. Hay versiones que han quitado el verso ¡¿Cómo se puede quitar el verso a Shakespeare?! ¡¿Cómo se puede quitar la música a Shakespeare?! Ahí ha sido necesario peinar cada palabra, de manera que he tenido que estar metido dentro de esas 11.000 palabras y meterlas en mi cuerpo para sentir el pulso orgánico que tienen esas palabras, la música, la fuerza y la imagen que proyectan. A esa reflexión sobre las palabras hay que añadir que Ricardo tiene en cuenta qué actor concreto que las iba a decir. Pensaba en mi grupo y es la suerte que tenemos al ser un grupo estable en cuanto los actores. Son los mismos que están en 5 espectáculos que llevamos a la vez: Celestina, Marat-Sade, Así que pasen 5 años, Madre Coraje que siguen en gira. El que sean los mismo es por lo que he peleado. Fue algo que vi en el Berliner Ensemble cuando estuve formándome. Eso es un desafío para ellos y lo que manda es ser fieles al autor sea Fernando de Rojas, Lorca, Peter Weis, Brecht,Shakespeare… No es lo mismo cómo escribe Fernando de Rojas, siendo clásico, pero no el verso, péntámetro yámbico, o cómo escriben los contemporáneos. En el clásico son muy fieles a Shakespeare, casi más papistas que el Papa, y en el lado contemporáneo nos encontramos con un tipo de interpretación, característica de Atalaya, como es el trabajo físico y mental (no psicologista), un trabajo extenuante. Tanto el trabajo biomecánico, el trabajo coral basado en nuestra gran maestra Esperanza Abad, y todo el trabajo escenográfico que es muy minimalista y en el Rey Lear acudimos a 14 bancos alargados de 2 metros que van configurando todos los espacios del espectáculo: casas, bosques, páramos…Por lo tanto somos muy fieles a Shakespeare en el texto y en la musicalidad; muy contemporáneos en la interpretación biomecánica de la coralidad, de la puesta en escena, de los coros que cantan, que son ellos mismos, basados en los bosques de Polonia y Bielorrusia con maestras que han venida de allí a trabajar con nosotros. CARMEN GALLARDO ES LEAR
Carmen Gallardo es cofundadora de Atalaya e interpreta a Lear. No es la primera vez que encarna personajes masculinos y después de interpretar muchos papeles masculinos, el Rey Lear, en ese aspecto, no es una dificultad. Para nosotros los personajes no tienen género. Lo más difícil de este gran personaje de la literatura universal, es pasar por todos los estadios por los que pasa este personaje. Comienza como un déspota y acaba con una locura muy cuerda dándose cuenta de la esencia del hombre en su desnudez. Quien me facilitad el trabajo es Ricardo, ya que voy mano con mano durante todo el camino. Confío ciegamente en él. En cada montaje tenemos una palabra que resume la esencia de la información que queremos dar. Es la protagonista de la obra más que cualquier personaje. En el Rey Lear sería «la ceguera»: el no ver la esencia del hombre y no valorar lo que tenemos hasta que lo perdemos. Ricardo a este respecto recuerda una frase crucial de Lear: «Poderoso es sentir como sienten los miserables. Que acabe la injusticia del mundo» Eso lo escribe Shakespeare en el 1600, parece estar escrito por José Luis San Pedro sobre los movimientos de indignados, lógicamente no con la calidad literaria de Shakespeare. Otra frase es «¿Has visto alguna vez a un perro guardián ladrar y perseguir al mendigo? – Sí – ¿Y al mendigo correr? Esa es la imagen exacta del poder: los perros obedecidos por su rango». Es un cántico contra los poderosos. Lear va desde ser un déspota a la locura pasando por el cinismo hasta convertirse en una persona con una empatía tremenda. Ricardo recuerda que hablando con José María Pou, intérprete de Lear y que ha visto muchos Lear en el extranjero, decía, al ver a Carmen en Lear, que los hombres al interpretar a Lear están muy sobrados de testosterona en la parte final. Reconoce que a él mismo le sobraba testosterona. Por eso Nuria Espert, Glenda Jackson, ambas con 80 años cuando han interpretado a Lear, y ahora Carmen, tienen fuerza pero no caen esa excesiva masculinidad. SILVIA GARZÓN
Silvia Garzón interpreta a Goneril. Un personaje que nada tiene que ver con el de Carmen que va hacia la bondad del ser humano. Goneril acaba asesinando a su propia hermana envenenándola. Es su última acción. Silvia como preámbulo advierte que los personajes se definen con relación a otros personajes. En base a la relación que tengo con cada una de mis hermanas y a la que tengo con mi padre el Rey Lear, con mi esposo, con mi amante, es lo que nos va definiendo a todos. Advierte a su hermana de lo que les esperaba una vez que Lear ha echado del reino a la otra hermana Cordelia que es la que más quiere. Lo expresa en una frase acerca de Lear: «Si de joven siempre fue vehemente, su vejez nos trae su peor carácter». Ahí comienza el guiño que se hacen la dos hermanas: ¡Cuidado con nuestro padre! Todo eso va creciendo en el desarrollo de la obra. Silvia hace hincapié en una opinión de algunos espectadores al salir del teatro: ¡Qué malas sois! Ahí hay un mensaje muy profundo: Si fuéramos hombres ¿también nos dirían lo mismo? o ¿Cuál es el papel de la mujer en relación con el Rey Lear aquí? Digo esto no por diferenciar, sino por tener en cuenta que Shakespeare plantea algo: son tres hijas, no son tres hijos. En esa época Shakespeare pone en boca de las mujeres el mismo discurso que puede poner en boca de un hombre, y ahí ya cambia el mensaje. Entonces son las hermanas malas que manipulan…¡No! Están actuando con la forma que el padre les ha enseñado durante toda la vida: defendiendo su terreno, evitando la invasión…Sí, al final, llega un momento en que por una rivalidad entre las hermanas por un amante, hay una parte más emocional, pro en la primera parte están desarrollando simplemente el papel del hombre. Eso hoy en día se sigue viendo como que son mujeres malas, pero no lo son. Si fueran hombres no se les juzgaría de esta manera.
En el ya apuntado trabajo de grupo Silvia ve la «fortaleza». Ricardo un par de semanas antes, nos da el material para que luego nosotros propongamos nuestra visión de cada obra que montamos. Esta parte es muy nutritiva para el grupo, para Ricardo y para los actores que pueden continuar en un proceso un año tras otro. Hacemos propuestas creativas con todo: iluminación, elección de músicas, coros, decidimos con quién vamos a trabajar… Es un proceso que ofrece un material a Ricardo para que vea cuál es nuestra visión poética de las cosas. También es poder expresarte como actor creador y no ser un actor peón. Una base importante, en Atalaya, es la formación de muchos maestros, aunque cada uno ha vivido diversas etapas. Esto supone un doble juego: aprendizaje de esos maestros y, a la vez, dan clases a los chicos del Laboratorio Es tomar algo y poderlo poner en otro lugar. Esto hace que nos regeneremos. Todo esto llega al montaje. Ahora hay tres compañeros nuevos que provienen de los Laboratorios.
FUNCIÓN PRECIO Descuentos
Título: Rey Lear
|