Bengala es un boxeador que ve su propia vida escurrírsele al tiempo que pasan los rounds interminables de una última pelea que lo acerca a su muerte. Una pelea desde su concepción desigual, con un novato, producto de la necesidad, la desesperación, de la decadencia, los abusos, la pobreza, el amor, las drogas, los deseos perdidos… Serán minutos atravesados por sus fantasmas: la Vanessa – su gran amor -, el Paco – su entrenador -, el Pollo – su amigo -, el doctor, el árbitro, su madre.
UNA VIDA ROTA Bengala es un texto de Alfredo Megna, abogado y dramaturgo argentino, con más de 25 piezas de teatro estrenadas, que alterna con su labor como director, tanto en Argentina como en distintos países de América y Europa. Este texto lo dirige otro compatriota suyo, Adrián Navarro, actor y director, el cual reside en Madrid desde 2018. Para Adrián, Bengala es
la historia de una vida rota. Una vida atravesada por la historia de ese personaje: su educación, su infancia y su alzamiento. Cuando uno nace lo primero que hacen es pegarte en la «cola» (culo) para ver si reaccionas. A Bengala le han pegado desde que nació hasta sus 46 años. Es el juego de una vida rota. Rota por la sociedad, por quien te juntas y relacionas en la vida. Ha sido golpeada por la vida en todos los sentidos, por sus amigos, su familia y todo lo demás. En el caso de Bengala hay un componente especial como es el de ser boxeador, ello hace que se mueva entre el éxito y el fracaso. O «sos» exitoso o «sos» un fracasado. Yo, particularmente, no creo en eso, sino en que hay un desarrollo desde que se nace hasta que llega el éxito. No hay éxito, ni fracaso. En Bengala, cuando habla de «estar gopeado», no es una excepción, porque en la vida todos somos golpeados. Bengala es parte de la vida y uno más como «vos» o como yo. La única diferencia es ser boxeador, y este personaje es una ficción. No tiene nada que ver con Sergio Maravilla Martínez. Bengala es la antítesis de Sergio. Sergio Maravilla Martínez, el actor que interpreta Bengala, es también boxeador en la vida real:Múltiple campeón mundial en categorías Superwelter (69.900 kg) y Mediano (72.500 kg). En 2015, tras estudios dramáticos, interpreta su primer trabajo teatral. Aunque todos somos golpeados por la vida, no todos somos golpeados de la misma manera. Un boxeador es golpeado literalmente con cientos de miles de golpes en la cabeza a lo largo de su carrera. «vos» y yo no tenemos miles de golpes literales en la cabeza. Esa es la diferencia entre un boxeador, un periodista, un actor… UNA METÁFORA DE LA SOLEDAD
Debido a ese golpe que todos recibimos en la vida, Bengala-boxeador parece ser una metáfora de la vida misma. Alfredo precisa que la obra es una metáfora de una persona sola en un rincón, sola en un ring, sola en el vestuario, encontrándose con todos sus fantasmas que no fueron golpes literales de puño, pero fueron golpes: la madre, su amigo, su mujer, su manager… Le golpearon emocionalmente: lo estafaron. Su amigo le llevó por el camino de la droga, de las mujeres fáciles, de derrochar dinero… Todo eso son golpes de la vida y cuando uno llega a una determinada edad, se da cuenta de que está en la nada. Por eso vuelve a pelear. Trata de recuperar un poco algo. Alfredo plantea la duda de si es real todo lo que se ve. Eso lo dejo para el espectador. Si se relaciona cómo comienza la obra y cómo termina puede ponerse en duda si lo que pasa es real o no. De todos modos entre un boxeador y el resto de los mortales hay una gran diferencia. BENGALA Y SERGIO UNA TENTACIÓN Al ver la corpulencia y físico de Sergio, no hace falta más datos para identificarlo como un boxeador, lo cual puede llevar a la tentación de crear una simbiosis a nivel de dirección. No. Al crear a Bengala, nos alejamos absolutamente de todo lo que tiene que ver Sergio. Sergio Martínez es zurdo. Bengala es diestro. Yo hice pelear a Sergio como Bengala. Eso nos llevo mucho tiempo y trabajo. Sergio es sumamente disciplinado: no bebe alcohol, no fuma, duerme ocho horas diarias. Bengala no duerme, se droga, bebe alcohol, derrocha… En principio la labor interpretativa de Sergio parece vislumbrarse más fácil debido a que Sergio conoce el mundo del boxeo y su entorno. También yo lo conozco, pero como curioso porque iba a trabajar con este texto. Al principio lo iba a interpretar yo. Tal revelación sorprende porque Adrián está bastante alejado de la corpulencia de Sergio, la cual parece ser clave a la hora de un «casting». No es tan necesaria esa corpulencia. Cuando me llegó esta pieza me dije: «Para hacer yo esta pieza, tengo que entrenar muchísimo». Sergio y yo nos conocíamos desde hace un tiempo, y pensé «a ver qué le parece esta pieza a Sergio«. Le encantó y le dije: «Vamos a empezar a trabajar este personaje que es muy arriesgado». Él se entregó a todo criterio y a toda observación mía. Es una persona sumamente permeable, sumamente atenta, y estoy contentísimo, feliz de haber trabajado con Sergio, como actor y conocerlo como actor, pues sólo lo conocía como boxeador. Éramos amigos de antes, pero esto nos llevó a un camino del arte que nos hace volar y fantasear. MÚSICA EN DIRECTO Facundo Quiroga ha compuesto la música, la cual es capital en el desarrollo dramático de la obra, y que marca, a nivel metrónomo la acción dramática y emotiva de Bengala. Se acerca a la exigencia de un cantante con su partitura musical. Hay una comunión que tiene que ver con la precisión. Nadie sigue a nadie, sino que es el tiempo justo. Lograr eso nos llevó mucho tiempo. Al principio entraba uno, después el otro… Ahora hay como una comunión y no es que alguien espera a alguien. Hay tiempos rítmicos: un, dos, tres cuatro; un, dos, tres, cuatro… Esto se clava en el cuerpo
UNA ESCENA VACÍA El espacio escénico es un espacio vacío entre luces y sombras, entre blancos y negros, habitado por sus fantasmas, y el clásico e infaltable banquito de boxeo. Adrián subraya: La luz, enmarca, disfraza, como si su pasado, su juventud se hicieran presenten es esta pelea final. Y hubiese un recorrido que podremos seguir entre sus primeras ilusiones, y este dolor desgarrador del conteo de un árbitro.
FUNCIÓN PRECIO
Título: Bengala (Una vida en doce asaltos)
|