La nueva propuesta del ciclo Notas del Ambigú del Teatro de la Zarzuela viene plagada de exquisitez y exotismo. Eduardo Paniagua, gran especialista en el ámbito de la música medieval, nos transportará a través de las Cántigas Alfonsíes y Canciones andalusíes, a la Baja Edad Media ibérica en la que, más allá de los enfrentamientos bélicos, el castellano y el andalusí se dan la mano con la alianza de música y poesía. Será el próximo lunes, 4 de marzo (20:00 h.) en el Ambigú del Teatro y, como ya es costumbre en este ciclo, con las entradas agotadas.
Con la participación de los músicos César Carazo (canto árabe, galaicoportugués y fídula), Wafir Sheik (canto y laud árabe) y Jaime Muñoz (gaitas, flautas y cornamusa), dirigidos por Eduardo Paniagua (qanún, flautas, pandero y canto), el público emprenderá un viaje por una época de fronteras y conquistas, en un tiempo en que en paralelo a los campos de batalla reales, existió una guerra cultural a través de un delicado refinamiento y especial cuidado de las Artes con mayúsculas. Se trata de un mágico recorrido por nuestra herencia, por nuestro patrimonio más exquisito y exótico, donde las diferencias y los conflictos de ambos bandos, el castellano y el andalusí, desaparecen en una apoteosis de música y poesía. Por su trabajo y por la difusión de estas músicas inéditas, Eduardo Paniagua recibe desde hace años excelentes críticas y premios internacionales. La Edad Media tuvo un papel definitivo en la formación de España. Una visión global de la música de la España medieval ha de tener en cuenta Al-Andalus, ya que en el aspecto cultural y musical tuvieron una extraordinaria interrelación. La música hispanomusulmana nos proporciona un ejemplo de simbiosis cultural de ricos frutos mezclando los logros musulmanes y cristianos en el crisol andalusí a lo largo de más de siete siglos. Constata que la civilización medieval es un todo homogéneo. Su tesoro musical, con el avance de los reinos cristianos del norte, y especialmente al finalizar la permanencia musulmana en la península Ibérica tras la expulsión de los Moriscos en 1609, pasa al Magreb donde hoy pervive. Las Cantigas de Santa María, comprendidas en cuatro códices de pergamino del siglo XIII, constituye la obra lírica más importante de la España medieval, y está considerada como la obra más personal de Alfonso X. El repertorio es de extraordinaria riqueza ya que sus melodías son todas distintas y originales. El mundo andalusí también se refleja en ellas. Compuestas y compiladas en el Alcázar de Sevilla, los códices que las guardan contienen asimismo las más valiosas miniaturas del siglo XIII. LA ESPAÑA MEDIEVAL Una visión global de la música de la España medieval ha de tener en cuenta Al-Andalus que en el aspecto cultural y musical tuvieron una extraordinaria interrelación. Canciones cortesanas arabigoandaluzas y sus contemporáneas cantigas líricas andaluzas en galaicoportugués. MÚSICA DEL-ANDALUS La música hispanomusulmana nos proporciona un ejemplo de simbiosis cultural de ricos frutos mezclando los logros musulmanes y cristianos en el crisol andalusí a lo largo de más de siete siglos. Constata que la civilización medieval es un todo homogéneo. Recordemos la evolución de los instrumentos musicales: ´oud-laúd, qanun-salterio, rabab-rabel, chababa-axabeba, nay-flautas, albuq-alboka, bendhir-pandero, tabl-atabal, etc. Así como las formas poético-musicales del canto: moaxaja, cejel; y los vestidos y movimientos de la danza. Todo su tesoro musical, con el avance de los reinos cristianos del norte, y especialmente al finalizar la permanencia musulmana en la península Ibérica tras la expulsión de los Moriscos en 1609, pasa y pervive hoy en el Magreb. La conservación de este tesoro musical es casi un milagro y su estudio y recuperación es un regalo para el patrimonio musical de Occidente y de la humanidad. LAS CANTIGAS DE SANTA MARÍA Eduardo Paniagua, alma de este proyecto musical resalta el valor de las Las Cantigas de Santa María,
Están comprendidas en cuatro códices de pergamino del siglo XIII, constituye la obra lírica más importante de la España medieval. Escritas en el idioma galaicoportugués, son cuatrocientos veintisiete poemas que nos han llegado con su correspondiente notación musical y adornados con extraordinarias miniaturas. Combinan relatos de milagros difundidos en la Edad Media con loores a la Virgen María, testimonio de la devoción mariana que se desarrolla paralelamente a la construcción de las catedrales góticas. Se considera la obra más personal de Alfonso X, apreciándose en ella la ordenación estructurada de todos sus elementos, aunque procedieran de distintos lugares y diversos colaboradores. Desde la primera redacción del cancionero, producida hacia 1260, se refleja una estructura estética en la que el rey Alfonso incluye sus originales trovas personales y un diseño simbólico unitario. Trovador tardío, elige la tradición del «amor cortés» con el gesto de entregar a su Dama los códices de pergaminos con las canciones a ella dedicadas. El repertorio es de extraordinaria riqueza ya que sus melodías son todas distintas y originales. El mundo andalusí también se refleja en ellas. Compuestas y compiladas en el Alcázar de Sevilla, los códices que las guardan contienen las más valiosas miniaturas del siglo XIII. Son un documento precioso, no solo por la perfección de dibujo y color, sino además por la información que aportan sobre la vida cotidiana de la España medieval de las culturas cristiana, árabe y judía. También tienen gran valor iconográfico, pues cada diez Cantigas aparecen dibujados numerosos instrumentos musicales. En alguna de las narraciones podemos encontrar escenas con canto y danza, que hoy constituyen la fuente principal del trabajo de reconstrucción de los instrumentos y del ambiente musical para su interpretación.
(Información Departamento de prensa del Teatro de la Zarzuela)
FUNCIÓN PRECIO Título:De Al-Ándalus a la Andalucía Medieval
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