Edipo(Alejo Sauras) sueña que despierta en un lugar extraño, que, sin embargo, le resulta familiar. Una gran estancia, de un solo color, donde le parece recordar que ya estuvo. Allí, una serie de hombres y mujeres peculiares le recibirán en una gran ceremonia y se convertirán en los protagonistas de su sueño. Todo en el sueño de Edipo es distorsión, es morbo, es una realidad a veces multiplicada, pero sobre todo deformada, llena de seres y situaciones que nos llevarán de la mano a través de la potencia de esta nueva tragedia.
LUIS LUQUE, director «SI NO PODEMOS ESTRENAR EN MÉRIDA Edipo es la novena colaboración entre el dramaturgo y Premio Nacional de Literatura Dramática Paco Bezerra y el director de escena Luis Luque, el cual, como director, es la segunda vez que accede a la Sala Principal del Teatro Español. En esta ocasión califica el montaje de trabajo arduo en el que ha tenido la ayuda de Natalia Menéndez, directora artística del Teatro Español, a la que considera una maestra como directora.
Me ha ayudado muchísimo, porque ha sido un proceso muy duro, donde hemos tenido muchos inconvenientes. Ha sido un ascenso a la montaña muy dura y Natalia ha estado acompañándome desde abajo, desde el patio de butacas. El «bichito» (COVID19) nos tocó también y tuvimos que parar, justamente antes de entrar casi en la última semana de Mérida. Le doy las gracias por todo lo que me ha enseñado y por su labor fantástica. Esta angustia por la incertidumbre de poder estrenar en el Festival de Mérida, Luis la vio calmada con las palabras de Jesús Cimarro, director de Pentación y coproductor: «Si no podemos estrenar en Mérida no estrenamos». Palabras alentadoras por la libertad que brindaba. No obstante Luis Luque le aseguró: Vamos a estrenar en Mérida y te agradezco, Jesús, que nos dejes trabajar en libertad, eligiendo los actores que quiero, la acciones plásticas arriesgadas o no, y desde ahí seguimos. Luis califica Edipo de obra con valores humanos y en este montaje se han potenciado VALENTÍA Y BÚSQUEDA DEL BIEN COMÚN el valor de la valentía y de la búsqueda del bien común. Es una obra sobre el conocimiento de uno mismo: ¿Quién soy?, es una de las primeras preguntas que se hace el personaje en la primera escena. Edipo es una tragedia poética, pero, también, es un «thriller» psicológico. El «thriller» ya estaba en la obra de Sófocles, y Paco Bezerra lo ha potenciado de una manera contundente, onírica y mágica. Para crear es magia y la poética me ha ayudado el actor y coreógrafo Sharon Fridman, porque es una obra que ocurre en la cabeza de Edipo. Es un mal sueño, una pesadilla y, de pronto, despierta de esa pesadilla y está en un lugar extraño monocolor creado por la escenógrafa Mónica Boromello, cuyo carácter de arquitecta le lleva a que construyamos un espacio muy contundente, donde despierta del sueño. Es sencillo, pero esconde un gran carácter simbólico.
El espacio se asemeja a un gran salón azul o una gran puerta que conduce a un mundo fantástico. Al fondo hay un gran muro como el de un palacio, que también es una escalera mágica por la que suben y bajan los personajes. Ese salón azul Juan Gómez-Cornejo la ha iluminado con una luz un tanto hipnótica y con un punto de alucinación, que evoca lo mágico y la belleza. El diseño de vestuario es de Almudena Rodríguez Huertas. Almudena ha creado un vestuario de inspiración contemporánea con elementos clásicos primando unos tejidos elásticos con los que crearemos el mundo de fantasía. La videoescena es de Bruno Praena. Con Bruno hemos ideado una visión muy próxima a los rostros de los personajes. Literalmente hemos ido al primer plano para ser testigos de cómo sueña Edipo y ver la emoción en los ojos de los personajes. Mariano Marín es el maestro compositor de la música original. El reto era crear los sonidos del sueño y de la pesadilla, pero no desde un lugar del miedo sino desde un lugar que fuera sensual, provocador, morboso y muy sugerente. ASUMIR RIESGOS: Una de las peculiaridades de este montaje es lo que Luis denomina «asumir riesgos» como es la opción por un reparto interracial y joven. Para muchos de ellos es su primera vez en estas tablas. Es una responsabilidad para ellos y para mí, pero era una de las propuestas iniciales que quedaron mientras trabajamos el texto. La juventud representa los personajes como eran en un inicio. Edipo vuelve a ese tiempo pretérito donde el mito se aloja. Sí, utilizamos la ciudad de Tebas como metáfora del mundo. Un lugar donde se escuchan distintas lenguas del mundo. Representamos la diversidad del color de la humanidad en una sinfonía de razas y lenguas. Me hubiera gustado que estuvieran representadas todas, pero no ha podido ser. El que haya distintas lenguas es porque el mundo es diverso y se escuchan muchos idiomas. Ayer – 6 de septiembre 2021 – conocí a Antonio Banderas y me decía que estaba sorprendido del talento joven que hay en este país. Lo hay, pero también tenemos la responsabilidad de poder desarrollar este talento para disfrute del público.
A Edipo lo encarna Alejo Sauras, del cual Luis destaca que se ha enfrentado a sí mismo y a la verdad que lidera su corazón. Hay veces que nos llegan los personajes para decirnos lo que somos. Siempre digo que si el personaje no pasa por uno mismo la obra no te toca y no puedes desarrollar un trabajo profundo. Me dicen que soy un director que lleva a los actores al abismo. Le he empujado, casi, al borde del acantilado y con toda su valentía ha ido más allá: ver cuál es verdad en el corazón. Alejo Sauras inició su carrera interpretativa en cortometrajes y en series televisivas. LuisLuquerecuerda que hay un a priori sobre los actores que han hecho su carrera en televisión como algo negativo. Estoy un poco harto de esos a prioris. Los actores y las actrices son actores y actrices. Da igual en el medio en que trabajan. Si han tenido la suerte, porque hay tantísimo paro, de que hayan desarrollado su carrera en un medio que no es el teatro, ¡»Bienvenido sea!» Me gustaría que ese prejuicio quede destruido de por todas, porque tenemos talentos. En el caso de Alejo ha subido a la montaña conmigo, se ha enfrentado con valentía y le doy las gracias. También se las doy al resto del elenco, entre los cuales hay algunos formados por mí, y es un orgullo poder llevarlos a este gran Teatro, que tantas alegrías me está dando y enseñando sobre mí mismo, sobre el teatro y sobre la verdad de mis ancestros personales y terrenales. Si no hay honra, no hay respeto, y sin respeto no hay humanidad. Edipo habla de honra y de humanidad. PACO BEZERRA, dramaturgo Paco Bezerra , Premio Nacional de Literatura Dramática 2009, es el autor de este Edipo, el cual supone la novena colaboración en diez años entre él y Luis Luque. Cuando le propusieron trabajar sobre un clásico, como ha sido Edipo, Paco se plantea varias opciones:
Hacer una versión como es quitar algunos personajes, limpiar algunas líneas de acción, quitar esto de aquí y ponerlo un poquito más allá…Son cambios que muchas veces tienen que ver con las condiciones del montaje. También se puede hacer una adaptación que es traer este texto a nuestros días, con cambios a nuestra sociedad, al momento actual. Por ejemplo cuál serie hoy la peste de Tebas, o Tebas traerlo a España y decir que la peste es el Coronavirus. También se puede no hacer una versión ni adaptación y escribir un nuevo texto, partiendo del mito y no de ninguna obra anterior, como sería Séneca o Sófocles. En esta última opción sería partir de Sófocles y escribir un nuevo texto como hizo Jean-Cocteau con La máquina infernal (1) u otros autores. De las tres opciones Paco escogió la tercera. Las razones fueron primero por la acción dramática, segundo porque es una oportunidad ya que se iba a ir al Festival de Mérida y luego al Teatro Español. Así que empezamos a escribir y la obra pasó por muchos sitios. Empezó siendo un western en un paraje desértico: llegaba a un motel y pedía una habitación. Era como en El resplandor, un motel absolutamente vacío. Era el único huésped. Una mujer desnuda se le sube encima de la cama y le propone un acertijo. Bien pudiera ser la esfinge. Acierta el acertijo y la mujer muere. El hombre se encuentra con el cadáver de una mujer desnuda en una habitación. Aparece un hombre con un casco en la cabeza que le dice: «Acabas de salvar a Tebas». Luis me dijo que no.
Una segunda opción tenía que ver con un huevo gigante que venía del cielo. Se posaba en Tebas y el huevo se abría y salía la esfinge. Ese huevo servía también con la puerta del palacio de Tebas. Al final ese huevo se cerraba y se comía a Edipo. Tampoco convenció. Por otro lado Mónica Boromello nos dijo que pasáramos del huevo porque ese abrir y cerrar del huevo no iba a ser muy elegante. Pasamos del huevo y una vez que Edipo actúa frente al público, porque siempre está enfrentado al pueblo de Tebas, me inventé un Edipo que alternaba ese Edipo público con un Edipo privado, que hablaba con Yocasta en el Palacio. Veíamos un Edipo más humano, pero Luis me dijo que al hacer esto íntimo, aparece un anti Edipo, pues nunca vemos a Edipo en la privacidad. Entonces se podría convertir en un drama y se perdería la solemnidad de la tragedia. Todas estas ideasPaco las agitó enla coctelera y se quedó con ese hombre que va andando por un sitio y se encontraba con una esfinge, con ese hombre que se le aparecía en la tele con un casco de metal y le decía que había salvado a Tebas de una epidemia. Me quedé con una de las escenas de Edipo íntimo dentro del Palacio, y con esta idea de una nueva esfinge, no de una bella muchacha sino como un espíritu que se va metiendo en diferente cuerpo.Me quedé con lo mejory lo que yo pensaba que todo anterior no conducía a ninguna parte, era el materialque iba a sustentar la reescritura. Cogimos lo mejor de las tres versiones, lo metimos en una coctelera onírica y al final el contexto es un sueño. UN EDIPO METAFÍSICO Y FANTASMAGÓRICO El resultado es que este Edipo es un sueño, una pesadilla. Es un Edipo metafísico y fantasmagórico. Metafísico porque Edipo vuelve a un lugar en el que cree haber estado ya. No es un lugar físico sino mental. Duda, como muchos de nosotros, de que esta realidad en este nuevo mundo que nos rodea, ¿es verdad o se parece más a una pesadilla con estas nuevas amenazas? También nos preguntamos si es la primera vez que sucede en la humanidad. Quizás para nosotros sí, pero tal vez esto ha ocurrido más veces. ¿Es un continuo repetirse o es un mundo apocalíptico? Un mundo amenazante que se acerca. Es un «thriller» psicótico, una tragedia psicótica y es fantasmagórica porque se enfrenta a todos esos fantasmas que posiblemente ha tenido otras veces. Es una especie de círculo infernal en cuanto que está condenado a repetirse, a salvar a Tebas una y otra vez. Aparte de esto, hay algo calderoniano: Si realmente lo que está viviendo es un sueño, y cómo podría escapar de esta pesadilla.
(1) Jean Cocteau se inspiró frecuentemente en Edipo: Traducción de Edipo Rey, de Sófocles; texto de Oedipus Rex para el Oratorio de Igor Stravinsky; La máquina infernal en la Comedia de los Campos Elíseos. FUNCIÓN PRECIO
Título: Edipo, A través de las llamas
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