1929: se publica el proyecto para la ópera de cámara El pájaro de dos colores. Se menciona a Conrado del Campo como autor de la música.
La partitura se archiva en un cajón, metafóricamente hablando, hasta que la rescata la Fundación Juan March y se la entrega al compositor y director musical Miquel Ortega para que complete la ausente orquestación. UNA PARTITURA DIFÍCIL
Miquel Ortega, Premio por su Ópera La Casa de Bernarda Alba estrenada en el 2019 en el Teatro de la Zarzuela (CLIKEAR), muestra su agradecimiento por tal ofrecimiento y recuerda que a pesar de ser una obra inconclusa le ocupó mucho tiempo, con la que estaba muy ilusionado, pero negativas o demoras, no se sabe muy bien, la obra quedó inconclusa. Hay una parte completamente terminada por Conrado del Campo de los años treinta, pero luego hay un boceto con las voces y una especie de partitura para piano sin desarrollar la orquestación hasta el final de la obra que está datada en 1951. Murió en 1953, con lo cual en este período compuso otras obras, pero nunca llegó a finalizar esta obra que tanto a él como al libretista Borrás les tenía muy ilusionados. No es para menos. Es cierto que el libreto es un poco enrevesado, pero la puesta en escena de Rita Consentino y el trabajo magnífico de los actores-cantantes-bailarines y músicos. Son un verdadero lujo y clarifica mucho la situación. Ayuda mucho la magnífica escenografía de Carmen Castañón y el vestuario de Gabriela Salaberri. Sólo eso ayuda mucho a clarificar el texto. Luego está la música de Conrado del Campo. En opinión de Miquel su música nunca fue fácil, pero destaca un gran virtud A pesar de su dificultad llega al público. A mí me gusta muchísimo el cine y el teatro, bueno a todas las artes. En el cine me ocurre algo similar con autores como Hitchcock o Willy Willer. Llegan al público pero cuando las analizas te das cuenta de la complejidad que tienen y que han influido en el resto de cineastas. Con Conrado del Campo podría suceder algo parecido. Conrado no se decantó por la escuela francesa como tantos otros compositores españoles, sino más por la germánica, puesto que se formó en Alemania, y podemos escuchar ecos de Richard Strauss e incluso de Wagner, aunque no copia nada. Todos los compositores tenemos influencia de alguien y esto es lógico. En Conrado está el uso de los leiv- motiv como Wagner, pero los leiv motiv los usamos todos. Yo en mi Casa de Bernarda Alba (CLIKEAR) hago uso extensivo de los lei-motiv porque me parece que funcionan muy bien en una obra teatral.
Miquel subraya que a pesar de la dificultad musical y vocal, que pueden corroborar los cantantes porque la «particella» de cada uno es muy exigente hay un atractivo que conecta directamente con el público sin necesidad de gran esfuerzo. Usa el jazz, el cabaret que viene muy bien con el tipo de obra y eso, ya de por sí, resulta atractivo. Además de la ilusión y responsabilidad por terminar esta partitura Miquel confiesa que ha sidoun placer examinar todos los manuscritos. Hay que decir que la caligrafía de Don Conrado, siendo bastante clara, no lo es siempre y, muchas veces, tanto los copistas como yo teníamos dificultades por saber qué nota era, porque su tonalidad, ya que es un músico tonal, es muy expandida. De repente te encuentras con notas muy disonantes que dice «Eso es un error». Luego resulta que no lo es, aunque algunas veces sí puede serlo. Raramente es un error. Mi trabajo consistió sobre todo en vestir de orquestación lo que quedaba pendiente que era bastante. La parte que dejó orquestada son unos 700 compases y ahora tiene más de 1.500. Esa parte estaba orquestada para una formación de cuerda un poco más grande. Ahí tuve que intervenir porque nosotros tenemos 11 músicos, contando el saxofón que tiene una pequeñísima participación. Luego a partir de ese momento solo con las voces y un guión de piano, he tenido que ir vistiendo la obra e intentar parecerme lo más posible a lo que hubiera hecho Conrado del Campo. No es fácil, aunque no hay que compararlo con la dificultad que pudo tener Franco Alfano al completar la ópera inconclusa de Puccini, Turandot. Por otra parte yo empecé a orquestar muy joven y he orquestado no solamente mis obras sino las de otros compositores y, entonces, desarrollas un cierto instinto como para saber qué es lo que Conrado hubiera querido. En muy poquísimas ocasiones él indica algún instrumento. En esa partitura para piano algunas veces pone flauta, trombón…En todo lo demás había que decidir qué es lo que iba mejor para cada frase. De todos modos es más difícil este tipo de trabajo que componer una obra completa desde la nada. INTERVENCION EN NOTAS DUDOSAS
Miquel asegura que ha intervenido lo mínimo en la música. La música que se va a escuchar es la de Conrado del Campo, porque la dejó esbozada. Me he permitido intervenir cuando había alguna duda de notas. Mis colaboradores Jerónimo Marín y Borja Mariño durante los ensayos nos han ayudado muchísimo con la partitura mientras yo dirigía, detectando posibles fallos, algunos lo eran y otros no, a clarificar la partitura. También he intervenido en los «tempi». Muchas ves es claro que tiene que cambiar la velocidad del fragmento pero no lo indica. Entonces hay que ir detectando y ver lo que funciona. Para mí siempre la base es el texto, incluso con obras de repertorio. Tengo que ver que sea cómodo para los cantantes el poder decirlo. Cierto que la obra de Conrado del Campo, que es muy contrapuntística, que es muy complicado porque hay muchos elementos en la orquesta el sacrificado es el cantante, hay que buscar un punto intermedio para que no sea tan difícil para ellos ni para la orquesta, pero siempre primar el texto. Que el ritmo del texto sea coherente, como si se hablara. Eso, para mí, es básico para determinar un «tempo» en una obra. MODIFICACIONES CON LOS CANTANTES.
A la hora de entrar en el proyecto los cantantes también ha habido que modificar ciertos momentos de la partitura Hemos cambiado pequeños detalles. Cosas que veíamos que no acababan de funcionar ya fuera por algunas que notas que parecían erróneas, pero luego mirabas el manuscrito y no todas parecían ser erróneas. También estaba la cuestión de «tempos» para que el texto no resultara artificial al decir una frase. A veces ocurría que había muchos elementos en la orquesta y te pedía un tempo más lento para entender lo que ocurre en la orquesta, pero se quedaba como a remolque el texto. Para mí el texto en el teatro musical, sea el que sea, zarzuela, ópera o musical, prima siempre el texto, porque, como experiencia propia de compositor que soy, el compositor crea a partir de un texto. Se dice «la letra no tiene importancia» ¡Mentira! La letra es muy importante, porque es de donde parte todo. En ese aspecto sí hemos trabajado bastante con los cantantes y cambiado algunas cositas, pero nada sustancial.
El tiempo empleado en esta composición orquestal, por parte de Miquel, ha sido de medio año, no seguido pero bastante intenso. Lo interrumpía cuando tenía conciertos o dirigir otras obras. Fue unos 6 meses cuando toda la escritura quedó clarificada y orquestada. He contado con la ayuda de los copistas de la SGAE, porque si no hubiera sido imposible copiarlo todo. Yo he copiado muchas cosas de las que yo iba haciendo nuevas desde cero y ellos las han pasado a limpio. Miquel subraya la dirección de escena de Rita Consentino, la labor vocal de los tres cantantes: Sonia De Munck (soprano), Borja Quiza (barítono), Gerardo Bullón (barítono), la labor interpretativa de Aarón Martín (actor y bailarín) y el grupo de cámara de la JONDE (Joven Orquesta Nacional de España), cuyo componentes cuentan entre 23 y 34 años, con Borja Martiño al piano, Daniel Bianco piensa que Rita Consentino es como un billete de lotería que sabes que te va a tocar, es segura. En el caso de Miquel, aparte de darle la enhorabuena porque el Teatro de la Zarzuela ha ganado el Premio a la XXI mejor producción de ópera con La Casa de Bernarda Alba (CLIKEAR), es muy importante el trabajo que ha hecho en El Pájaro de dos colores, porque es bastante difícil que te den una partitura y completarla. Eso sí que es complicado, pues supongo que su cabeza ha estado continuamente preguntándose hasta donde puedes y no puedes entrar. Realmente es un buen espectáculo y pasado un tiempo estaremos muy orgullosos de haberlo coproducido.
EL LIBRETO DE TOMÁS BORRÁS
Rita Consentino, que ya en 2017 había dirigido escénicamente la versión de ópera de Cámara Mozart y Salieri de Rimski-Kórsakov (CLIKEAR) para la coproducción de la Fundación March y el Teatro de la Zarzuela, vuelve al formato Teatro musical de Cámara de la Fundación Juan March, para enrolarse en este Pájaro de dos colores, que no le resulta fácil. porque no tenemos antecedentes ya que no se ha estrenado. Es un compromiso muy grande para todo el equipo y no solamente para Miquel y para mí. Crear un imaginario para esta obra completamente nueva y contar de la mejor manera posible lo que cuenta no es fácil. El libreto es poesía pura, pero hay que contar el cuentito y esto es lo más difícil, pues hay que desentrañar qué me está contando esto y ponerlo sobre el escenario lo más claro posible. No nos olvidemos que esto es un proyecto, también para colegios y no sólo para el público adulto. Rita insiste en que hay que procurar que la narración y la música lleguen a esos adolescentes y que haga que no sea la única vez que vengan al teatro. Destaca labor de Miquel Ortega, con el que ya ha trabajado en otras ocasiones, en el momento de la puesta en escena, con lo cual la experiencia ha sido «maravillosa». En el libreto original sólo hay tres personajes, sin embargo en esta versión hay un personaje más, definido como actor y bailarín, que interpreta Aarón Martín y que se ha inventado Rita Consentino. Ha sido un trabajo arduo hasta llegar a la orquesta e integrar la música como propia en cada uno de los personajes. Estoy muy contenta cómo se han ido perfilando los personajes. La historia no es fácil, pues es un poquito enrevesada, pero con el talento y la creatividad que ha puesto cada actor para crear el personaje todo se hace más claro y sobre todo mágico. Si hay algo que tiene esta obra es fantasía, magia y poesía. Es un mundo mágico que hemos creado de la nada. Lo que lo une todo es la música. UN NUEVO PERSONAJE
Ese personaje nuevo lo interpreta Aaarón Martín. Una vez que la obra se estrena por primera vez y el público no conoce el original, no distingue si es un personaje añadido o la fábula de Borrás es así. Al principio es uno más de la «troupe» – aclara Aarón Martín -, ya que hay algo del teatro dentro del teatro. Comenzada la historia del pájaro y del mono mi personaje es un ayudante del mono. Siempre que el mono necesita algo me lo pide. Es un personaje que tiene mucho más que ver con el clown y con el mundo del circo. Siempre está metiendo la pata ya que a veces ayuda al mono, otras le estorba. Siente una debilidad por el pájaro porque es el amor ideal y se queda embobado mirándolo. A nivel técnico es un personaje que sirva para que la escena fluya más fácilmente ayudando en todas las cosas que van sucediendo. Al no tener que cantar puedo ayudar a los tres, el mono, el tigre y el pájaro para que las acciones ocurran de un modo más fácil. En la obra el mono, el tigre y el pájaro son animales que encarnan ciertos valores: la inteligencia, la razón o la pasión. Cada uno de ellos es una alegoría – precisa Rita Consentino. Simbolizan un aspecto de la condición humana. Lo difícil y que irá creciendo a lo largo de las funciones es cómo encarnar a un mono, a un pájaro o a un tigre. Estos rasgos empezaron a nivel corporal, ahora va pasando, lentamente, por las cuerdas vocales del instrumento de los cantantes. Eso va dando la totalidad de ese personaje del cual ellos se adueñaron.
UNA SÁTIRA MUY FUERTE
Miquel precisa que al principio pensaron que se trataba de un bajo y un barítono, pero en cuanto empecé a analizar la tesitura de El mono, vi que no era un bajo. Es un barítono normal. El Tigre no es un barítono normal. Es un barítono agudísimo, porque quiere la agresividad del tigre. Los agudos están en la tesitura de barítono, pero la dificultades es que están en la zona de pasaje. Luego está la dificultad añadida que tiene un aria tan dulce, tan cantable y que hay que cantarla a media voz que contrasta con el resto y resulta más difícil. Eso no quiere decir que el papel de El Mono sea más fácil. La dificultad de El Tigre es una tesitura muy aguda, pero El Mono tiene unas frases extremadamente difíciles y tiene muchísimo texto. Quizás es el que está más tiempo en escena. Hay muchos momentos en que está solo, la música cambia muchísimo de estilo pues todo pasa a través de El Mono. Luego El Pájaro (Sonia de Munck) la protagonista, aunque es un papel más corto, es de una extrema dificultad. Es algo tremendo, sobre todo la primera parte que es el Pájaro, y está muy bien porque no hay letra y no está articulando, hasta que El Mono hace un hechizo. Cuando llega El Tigre que se ha enamorado del canto del Pájaro, entonces El Mono, con toda la maldad del mundo, dice «Ahora vamos a convertirla en Mujer» y canta un aria con texto. En la línea de aquello de «¿No quieres Caldo? Pues toma dos tazas», le dice a El Tigre «¿No quieres amor pues toma una mujer». Es muy gracioso en el contexto, porque El Mono es un misógino tremendo. Por parte de Borrás es una sátira muy fuerte en aquel momento de defensa de la modernidad de lo que tiene que ser una mujer de verdad, y luego critica esa misoginia tremenda de el Mono. EL PÁJARO DE DOS COLORES Según Miquel la autoría de la partitura, una vez que hay una parte orquestal nueva está clara La autoría es absolutamente toda de Conrado del Campo, pues yo sólo me he permitido intervenir en cosas dudosas. Nunca cambié nada de lo que él dejó en el esbozo, salvo un error evidente o una frase de Borja Quiza que por la medida no entraba bien, lo cual es curioso porque Conrado del Campo respeta mucho la prosodia. Cambiamos el ritmo pero es casi imperceptible. Hizo que la frase entendiera mucho mejor. Antes de los 700 compases hay dos partes muy cortas mías de orquestación y luego hasta el final, unos 1.500 compases, la orquestación es mía. Esa sería la autoría. Como Chueca y Valverde, que Valverde orquestaba, yo soy Valverde (risas).
FUNCIÓN PRECIO
Título: El pájaro de dos colores (Ópera de Cámara) EQUIPO TECNICO FUNDACION JUAN MARCH Grupo de cámara de la JONDE (Joven Orquesta Nacional de Espana) Intérpretes: Dirección de escena: Rita Cosentino
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