Llega al Teatro Pavón un proyecto operístico un tanto insólito. En España la ópera se reparte en los grandes Teatros de Ópera, Teatros de menor calaje con una ópera más popular, y ahora surge una Compañía Sing Us, con cantantes de ópera jóvenes, pero de un recorrido operístico considerable, sobre todo a nivel internacional, para interpretar La Bohème, una ópera en cuatro actos compuesta por Giacomo Puccini. La historia original transcurre en París durante el siglo XIX y cuenta los avatares de un grupo de jóvenes bohemios que luchan por sobrevivir en la pobreza mientras persiguen sus sueños artísticos. RESCATAR LA ÓPERA Eva Marco, soprano lírica, que interpretará a Mimí en esta versión de La Bohème, nos informa de la filosofía de este Compañía enrolada en la productora Sing Us.
Nos decidimos fundar esta Compañía porque encontramos que aquella música que es perfecta y que es una pieza de arte que permite cambiar los estados de ánimo, nos encontramos que no teníamos un espacio dentro del público madrileño, y, por ende, en el público español. La ópera y la zarzuela estaban reservadas a unos circuitos mal llamados elitistas, pues creo que no hay nada de elitismo en este arte, es puramente artesanal, no se lleva micrófono. Se practica en vivo. Así fue concebido, a la luz de las velas, y para ser cantada mientras se hacían negocios y formaba parte de la vida social. Hemos querido rescatarla en una apuesta muy arriesgada. Queremos volver a traer, sobre todo ópera, ya que la zarzuela es más fácil encontrarla en Madrid. La ópera está reservada a 5 Teatros Nacionales en España, mientras que en Alemania son 182. Entonces evidentemente los artistas líricos competimos en desigualdad de condiciones. Por lo tanto para nosotros es muy importante contar con nombres de la lírica española que no son tan conocidos quizás. Son carreras jóvenes que comienzan, pero merecen una oportunidad. Es la primera vez que se hace ópera en el Teatro Pavón, que es un teatro de prosa, y que circunstancialmente presenta musicales. Traer ópera a un teatro de estas dimensiones con orquesta sinfónica y cantantes de ópera que comienzan, con carreras ya internacionales, no solamente es una apuesta sino que es un honor poder traer esta música aquí y poder acercar al público, poder democratizar la ópera, poder tener unos precios asequibles, y traer este título que es el «capolaboro» (obra maestra) de Giacomo Puccini.
DE MARÍA CALLAS SFOGATO Eva Marco, soprano lírica, interpretó a María Callas en la parte cantada, ya que el personaje se desdoblaba, en el espectáculo escrito por Pedro Víllora Maria Callas, Sfogato (Cuando Callas Encontró A María) (CLICK). Este espectáculo estaba dirigido escénicamente por Alberto Frías, que en La Bohème también ha tomado las riendas de director de escena, añade:
A esta primera ópera, La Bohème, le seguirán otros títulos como La Traviata, Carmen…Como dice Eva, queremos llevar la música a la calle y a los barrios. Es verdad que en el Teatro Pavón, ahora mismo no hay lírica, pero no hay que olvidar que en esta Teatro se estrenó Las Leandras(revista musical de Alonso, con Celia Gámez), y mucha revista, así como lírica. Desde el principio teníamos claro que queríamos hacer un elenco en que hubiera gente española, que parece que se les olvida mucho a las casas de ópera, y nosotros queríamos rescatar a estos jóvenes que no han tenido su sitio en España. Alberto Frías, tenor y director de escena, se dio a conocer en La Revoltosa (Proyecto Zarza) (CLICK) del Teatro de la Zarzuela. Ha actuado como actor en teatro de prosa, y a nivel lírico últimamente ha interpretado El Santero y Charlatán en la versión de Pan y Toros (CLICK) (2022) del Teatro de la Zarzuela. Como director ésta es su primera ópera grande. No la he cogido con miedo, aunque sí con respeto, pero desde el texto, que está muy bien escrito y, para mí, es lo principal. Dice muchas cosas y la maravillosa música de Puccini, a veces, pasa por encima del texto. Aquí he sido muy claro con lo que dice cada personaje, cómo lo dice y porqué lo dice. LA BOHÈME, DEJA LA BUHARDILLA Y Alberto Frías ha ubicado la ópera en un cabaret. Todo pasa en ese cabaret. A orquesta vista, sobre el escenario, suceden la escenas donde los jóvenes de ese cabaret se encuentran con una vida bohemia y donde, sobre todo, poder disfrutar; donde el amor «amoroso», pasa incluso hambre. A los cantantes les he dado mucha caña actoral y ellos me lo han permitido. Son maravillosos/sas. Sucederán muchas cosas, aunque, por supuesto, contamos La Bohème, y no cambiamos ni una nota de lo que escribió Puccini. Tenemos Coro. Es una apuesta grande y donde queremos que la gente no vea la ópera como algo elitista, sino que se acerquen y no tengan miedo a la ópera. La van a entender, se van a reír muchísimo, disfrutarla y van a ver que la música clásica no es esa que escuchan en los anuncios de colonias y perfumes, sino que les va a resonar mucho.
El vestuario está ambientado en los años treinta parisinos. Vamos a ver mucho cabaret, mucho Moulin Rouge, mucho corsé, hay chicas muy destapadas, y por eso hay mucho frío (risas), pero la juventud puede con el frío. Ellos siguen la moda de la época. La escenografía se adapta la filosofía del Teatro Pavón de una programación continua. Al haber mucha programación hay poco tiempo de montar y hemos encontrado soluciones para sentirnos en un cabaret. La puesta en escena afecta al tratamiento de los personajes. Según Eva Marco, intérprete de la modistilla Mimí Mimí se convierte en heroína por primera vez. No es ese personaje que languidece, que pierde su energía y la vida en el transcurso de los actos de la ópera. Todo lo contrario. Es cierto que a partir del tercer acto es consciente de su muerte, aunque, de alguna manera también lo es desde que comienza la ópera. Hay un cambio de carácter, y una deconstrucción del personaje y Alberto ha hecho su particular visión sobre el personaje, que, además, va más acorde con la mentalidad de nuestro siglo. Mimí no tiene esa debilidad, ni esa vulnerabilidad. Es cierto que la vulnerabilidad viene a través de la música, pero ya está escrita, y Alberto pensó que no era necesario redundar en la delicadeza del personaje, sino que la música ya lo da. LA PUESTA EN ESCENA Al principio se pensó, por cuestión de tiempo, presentar La Bohème en versión de concierto, pero salvado ese tiempo se ha podido presentar como ópera competa escenificada con vestuario y todo lo necesario visualmente y con Orquesta, Coro y Solistas. La orquesta de 17 músicos no está situada en foso, ya que en el Teatro Pavón no lo hay, pero Alberto precisa que si hubiera habido foso, también la habría subido al escenario, porque me gusta esta visión que le da al espectador de un poco «banda» Big Bang, banda cabaretera. De este modo conseguimos esta fusión de géneros: lo cabaretero, lo más clásico, el juego con los músicos… Esta interacción– precisa Eva – es la especialidad de nuestra Compañía: insertar la música clásica dentro de obras de teatro como en María Callas, sfogato (CLICK) o The Royal Gag Orchestra. La ópera sucede pero dentro de un contexto y una historia para que esa acción dramática la pueda seguir y la pueda comprender. Realmente la ópera no es para expertos. Como cualquier arte requiere comprensión y cierto detenimiento, que no tenemos ahora en nuestra sociedad. Yo misma, que soy melómana y cantante, voy a óperas que, quizás, no las entiendo del todo. La oportunidad es que hay que dar la ópera con la mente muy abierta. Por eso nosotros intentamos que los músicos y los cantantes interactúen de tal manera, para que el púbico pueda entender perfectamente lo que está sucediendo. En esta versión se han hecho algunos ajustes como es el coro de niños que se ha acortado musicalmente, y presencialmente los niños no existen. Se ha resuelto con las chicas que cantan en el cabaret. En el segundo acto abrimos la cuarta pared. La gente del Coro baja al patio de butacas, vende sus productos, juega con el público, y el coro de niños son esas chicas. ¿OPERA MICRFONADA? María Callas Sfogato (CLICK), el canto operístico estaba microfonado, algo que resultaba un tanto incomprensible para el público, máxime en un teatro de prosa al uso como el Teatro Infanta Isabel. Eva, la intérprete de aquel espectáculo aclara. Cualquier cantante de la lírica cuando vemos un micrófono genera cierto rechazo. Para empezar se pone en tela de juicio la capacidad de emisión del cantante, porque el entrenamiento de un cantante lírico debería ser sin micrófono. En el caso de María Calla Sfogato el micrófono nos permitía el efecto teatral fantasmagórico, el efecto teatral de ese destello sobre la cara de la cantante, y además permite cierto «reverb» en el que ella se interpreta a sí misma y entra en conversación con María, y esto nos permite que al no haber verdaderas «sfogatos» (gran amplitud vocal como la Callas), una soprano grande pueda interpretar Dalila en condiciones de seguridad y se le oiga en la fila número 15, algo que es prácticamente imposible de encontrar. Se puede encontrar una mezzosoprano que lo haga, pero no una soprano que tenga cierto volumen para poder abordarlo. Entonces el micrófono es imprescindible para interpretar María Callas Sfogato. Como no hay soprano sfogato, yo puedo cantar en una y otra cuerda, pero eso no significa que la ejecución del repertorio que no me corresponde como soprano pueda ser lo que el público espera. En esa obra también las actrices van microfonadas. Por otro lado no todos los teatros líricos en España tienen la sonoridad que permite cantar ópera con condiciones de seguridad, y que uno tenga una buena escucha. Así que el micrófono era imprescindible para el desarrollo de la obra de teatro. Hemos sido un poco criticados por eso, y lo entiendo perfectamente. Aquí vamos sin micrófono y además la acústica del Teatro Pavón lo permite.
LA COMPAÑÍA SING US La Compañía Sing Us nació para ser ópera de ahí la urgencia de programar La Bohème. Queríamos llevar el género lirico a todo el mundo y necesitábamos hacer una ópera. No surgió esta posibilidad y dijimos «¡Adelante!» Traeremos títulos que se conocen y tocaremos también la zarzuela, pues somos grandes amantes de la zarzuela. El tiempo requerido para un montaje como La Bohème ocupa dos meses y un año de preproducción.
En la actualidad Sing US mantiene cuatro espectáculos en Madrid: María Callas Sfogato (CLICK), The Royal Gag Orchestra, Milenial, El amor Falla (Diana Navarro), gracias al amor por el teatro de Alberto Frías y el amor por la música de Eva Marco. Guiomar Cantó se ha unido también al equipo de producción. El secreto es el amor por lo que hacemos sin importar el resultado económico. También intentamos cuidar a nuestros artistas, que se sientan únicos dentro de sus posibilidades; que tengan el protagonismo aunque su rol no sea el más específico o el más extenso. Intentamos no prejuzgar en las audiciones; miramos a la cara a los artistas; nunca miramos al teléfono; siempre agradecemos a todos y personalmente la asistencia a nuestras audiciones. Si descartamos al candidato damos las explicaciones…Todo esto proviene de nuestras experiencias como artistas en el pasado. Seguramente cometemos algunos errores, pero lo que prima aquí es el amor por el Arte y sobre todo el entusiasmo por cada proyecto.
FUNCIÓN PRECIO Título: La Bohème
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