
LA TRAVIATA
(Ópera en tres actos)
Música: GIUSEPPE VERDI
Libreto: FRANCESCO MARIA PIAVE
Dirección del coro: JOSÉ LUIS BASSO
Dirección musical: HENRIK NÁNÁSI / FRANCESC PRAT
Dirección de escena: WILLY DECKER
Intérpretes
NADINE SIERRA / ADELA ZAHARIA /
KARINA DEMUROVA / GEMMA COMA-ALABERT /
XABIER ANDUAGA / IVÁN AYÓN RIVAS / JUAN DIEGO FLÓREZ /
LUCA SALSI / ARTUR RUCINSKI / GËZIM MYSHKETA /
ALBERT CASALS / TOMEU BIBILONI / DAVID LAGARES /
GIACOMO PRESTIA / JOAN LAÍNEZ /
en el
TEATRO REAL
(SALA PRINCIPAL)
de
MADRID
Radio Clásica, de RNE, grabará la ópera para su posterior emisión
Del 24 de junio al 23 de julio de 2025
– En 2020 en la Pandemia, la producción de “La Traviata” de Willy Decker, aclamada en el Festival de Salzburgo hace 20 años, obligaba a un montaje adaptado a las normas de seguridad sanitarias vigentes. Llega ahora en plenitud retomando la puesta en escena original.
– Se trata de una potente dramaturgia en la que late la “cuenta atrás” hacía la muerte de la protagonista, evocada por un enorme reloj en la escenografía conceptual y luminosa de Wolfgang Gussmann.
– Henrik Nánási estará al frente del Coro y Orquesta Titulares del Teatro Real en 16 funciones. Francesc Prat dirigirá la ópera los días 1 y 10 de julio.
– Las sopranos Nadine Sierra y Adela Zaharia se alternarán en el papel titular. Completan el trío protagonista, los tenores Xabier Anduaga, Iván Ayón Rivas y Juan Diego Flórez (Alfredo) y los barítonos Luca Salsi, Artur Ruciński y Gëzim Myshketa (Giorgio Germont).
– La función de “La traviata” del 19 de julio se retransmitirá a las 21.00 horas en distintas ciudades y pueblos de España, ya sea en auditorios, plazas u otros espacios, en una coproducción audiovisual con TVE.
– Las funciones de “La traviata” están patrocinadas por Telefónica
Del COVID-19 A LA TEMPORADA 2024/25
La temporada 2024/25 finaliza con “La traviata”, y se cumple el compromiso de volver sobre esta versión de Willy Decker. La razón de retomarla es, cinco años después, porque con esta versión abrimos el COVID -19 al mundo del espectáculo (click), una versión un tanto especial ya que la disposición de la escena no se correspondía al original de Decker sino a una ingeniosa trasposición en el que respetaban las distancias establecidas por la Pandemia. “La traviata”se alterna con “I Lombardi” el 6 y 9 de julio. El 19 de julio se retransmite a través de conexiones de Televisión Española de modo que se llegará a más de 200 pueblos, más allá de Madrid. Esta versión de Willy Decker es unaproducción de la Ópera Nacional holandesa (Dutch National Opera & Ballet) que “arrasó” en 2005 en el Festival de Salzburgo y que sigue triunfando en los teatros de todo el mundo 20 años después de su estreno.
Violetta Valéry es una cortesana de París que conjuga una vida glamorosa, con una grave enfermedad, la tuberculosis. Vive del dinero que le dan sus benefactores. En una de esas frívolas fiestas conoce a Alfredo Germont, un joven de buena familia. Se enamoran y dejan París para recluirse en el campo. Violetta no es bien vista por el padre de Alfredo, pues ve que esa relación no conduce a nada. Le pide un sacrifico, que lo deje…

FOTO: JAVIER DEL REAL
DE MARIE DUPLESSIS A VIOLETTA VALÉRY
El proceso de esta historia parte de una figura histórica, Marie Duplessis (1824-1847) y su vida lujuriosa entre artista y bohemios del París decimonónico. Alejandro Dumas hijo (1824-1895), amigo y cliente, junto a Franz Liszt y otros intelectuales, artistas y nobles también amigos y clientes, se siente impresionado por la muerte prematura de Marie a los 23 años. Muere de tuberculosis. Tal impresión le lleva a escribir una novela, “La dama de las camelias”. La novela comienza con los funerales de Margarita Gautier, que es el nombre de la heroína en la novela. El mismo Alejandro Dumas adaptó la novela al teatro manteniendo el mismo título. Se estrenó en 1852. Lo más llamativo es que se pasaba del drama romántico al drama realista. Esto impactó a Verdi y vio la posibilidad de adaptarla a ópera, con lo cual rompía los cánones de la ópera romántica y ofrecer una ópera realista. Tanto la novela como la pieza teatral está ambienta alrededor de 1840. Ello supuso un escándalo, pues el espectador veía sobre el escenario el vestuario y los escenarios de su propia época. Tal realismo molestó y surgió la polémica. Muchos de los espectadores abandonaban el teatro. Para poder seguir adelante se trasladó la acción a 1700. En 1880 se retomará la acción a 1840.
“La dama de las Camelias” pasó, con música de Giuseppe Verdi, a titularse “La Traviata” (La extraviada), en versión operística. El libreto de Francisco Piave, partía de los diálogos de la versión teatral, pero la música de Verdi mantenía la estructura de la novela, comenzar con la muerte de la protagonista, que no se llama Margarita Gautier sino Violetta Valéry, en el preludio. Su amante Armando Duval, en la novela, pasó llamarse Alfredo Germont en la ópera.

FOTO: HANS van den BOGAARD
HENRIK NÁNÁSI, director musical
TANTO LOS PERSONAJES COMO LA MÚSICA
SE PUEDEN VIVIR, EN CADA MOMENTO, CON CIERTA DIFERENCIA
Henrik Nánási dirige esta versión de Willy Decker, y su “curriculum” muestra unas credenciales verdianas impresionantes, en opinión de Joan Matabosch, director artístico del Teatro Real. Henrik pone por delante el gran placer que supone dirigir la primera ópera en versión escénica en el Teatro Real.
Ya había venido para dirigir conciertos. Verdi es uno de los compositores que más he dirigido a lo largo de mi carrera, incluso obras mucho menos conocidas que “La Traviata”, como es “Alzira”. El reto principal que se plantea a la hora de dirigir “La Traviata”, es la necesidad de cerrar la partitura y empezar como si fuera la primera vez, por ser tan conocida por el público, los cantantes, y en concreto los cantantes de esa versión la conocen tan bien, que ese es el reto principal. Mis partituras están llenas de notas. Tengo que borrarlas, porque se trata de recrear y de vivir la partitura. Incluso en cada momento me encuentro en una situación distinta de mi vida. Hace dos años la dirigí por última vez y el sentimiento hacia la obra es también distinto. Por eso hablo de revivir la obra. Tanto los personajes como la música se pueden vivir, en cada momento, con cierta diferencia.
Otro rasgo que hay que tener en cuenta en esta ópera y es importante, según Nánási es que
Antes componer “La Traviata”, Verdi había perdido a su mujer y a sus hijos. Esta es una fuente suplementaria de inspiración, porque es como situar a su mujer muerta en el lugar de Violetta. Por eso cada movimiento expresa todos los sentimientos del alma y del corazón. Es la ópera más íntima de Verdi que contiene todos estos sentimientos.

FOTO: JAVIER DEL REAL
WILLY DECKER, director de escena
AMOR Y MUERTE UNIDOS INDISOLUBLEMENTE
La versión operística de Willy Decker viene muy marcada por el espacio escénico de Wolfgang Gussmann, una estructura semicircular donde transcurre la vida truncada de Violetta Valéry, con una presencia llamativa de un gran reloj que marca la cuenta atrás a lo largo de toda la ópera, y la presencia fantasmal del doctor Grenvil, el cual es una evocación de la muerte expectante. Willy Decker confiesa que como director le ha ocurrido muy pocas veces el haber encontrado una obra que haya captado su atención y que quería hacer a toda costa, como es “La Traviata”.
En cuanto la vi, decidí que quería hacerla. Desde mi primera lectura de “La Traviata” sentí una profunda compasión el personaje de Violetta. Desde que empecé a trabajar en la ópera tenía esta idea de permitir al público concentrarse en esta figura central de la ópera que es Violetta. Es decir, dar al público la oportunidad de compartir los sentimientos de Violetta en ese largo proceso de muerte que describe la ópera. Permitir que el público acompañara Violetta en este proceso.
Willy Decker destaca el arranque de la obra fijándose en el Preludio.
Es interesante ver que Verdi comienza la música de “La Traviata” con la misma música que termina, es la música de la muerte de Violetta. En esta obra amor y muerte están unidos. En Violetta en ese conocimiento de que su muerte está próxima, por eso vive profundamente. O sea, vida y muerte están muy conectadas. También esta presente continuamente en la obra. Es como un presagio, un dar a la obra una circularidad completa, de la cual he partido, de ese carácter circular de la obra como base. Cuando yo ya había decidido que quería montar “La Traviata”, tuve la suerte de que el Festival de Salzburgo me hizo el encargo. El escenario tiene 32 metros de ancho, el mayor escenario de teatro que hay. Para poder permitir que el público pudiera centrarse sobre este drama íntimo, tuvimos que concebir este escenario semicircular, de forma que el público actuara como una lente para centrando la acción.

FOTO: HANS van den BOGAARD
ALFREDO GERMONT, DISTORSIONADOR
DEL CAMINO HACIA LA MUERTE
Decker se centra en lo que Verdi nos transmite desde el principio de la ópera.
Violetta sabe que va a morir y lo sabe también el público. Sabe que su tiempo se agota. Trata de obviar esta realidad y apartarla de su mente, por eso se dedica a beber, a divertirse, a frecuentar los salones de la noche parisina, pero ese Reloj inexorable de la muerte sigue sonando en sus oídos. No puede librarse de él. Es decir, el único elemento fuerte y presente siempre es ese Reloj. En este conocimiento de que el tiempo avanza inexorablemente y que su muerte está cerca, hay un elemento que viene a distorsionar esta realidad que es, precisamente, la presencia de Alfredo, el cual es el primer hombre que se interesa realmente por Violetta, como ser humano. Ella hasta ahora no lo había experimentado. De hecho, en la obra, antes, hay un momento en que se mira largamente al espejo y se pregunta ¿quién soy? Alfredo le ofrece ese sentimiento puro de amor duradero, que es lo que busca, pero para ella no es posible, por eso trata de rechazarlo. En el primer acto se ríe de él y habla de forma vulgar, pero no funciona. Finalmente, Ella se entrega, aunque sabe que ese sentimiento de amor duradero no va a ser posible. En el segundo Acto huyen de París y se construyen ese nido de amor de cuento de hadas, en el campo
EL DE VIOLETTA, UN AMOR SINCERO,
EL DE LA SOCIEDAD, UN AMOR MATERIALISTA
Ese sentimiento de amor duradero se ve interrumpido por la visita del padre de Alfredo, Giorgio Germont. Según Willy Decker
Giorgio Germont es un personaje muy inteligente, que apunta a la compasión de Violetta. Le dice que su hija, la hermana de Alfredo, no tendrá éxito si persigue en ese amor, y le muestra la foto de la chica. Entonces Violetta decide sacrificarse por esa hija de Giorgio Germont. Aquí aparece la idea de que la moral burguesa quiere imponerse sobre esta moral de esta mujer disoluta. Sin embargo, es al contrario. Violetta es la única mujer que ofrece un amor verdadero, pero es marginada de una sociedad que defiende que ama el amor puro y no este amor que se compra con dinero. Es un menaje que Verdi transmite claramente. Es un amor sincero, mientras que el de los demás es puramente materialista.
Es interesante ver la reacción de Giorgio Germont.
Al principio actúa de forma muy cruda con ella, destruyendo los sueños de vivir esa vida idílica, pero, al final, se da cuenta de su error y le pide perdón. Es decir, la obra da la vuelta al modo de vida de la moral burguesa y nos hace ver que el único personaje profundamente humano es Violetta. Cuando empecé a trabajar, enseguida capté ese concepto y es inhabitual en mi trabajo, pues, antes de decidirme, suelo tener muchas conversaciones con mi equipo. Aquí no, porque me identifico con esta obra, y por eso hay solamente una mujer, que es Violetta, y todos los demás son hombres. Incluso el Coro va todo vestido de hombre. Yo quería recalcar este conflicto entre hombres y mujeres.

FOTO: JAVIERR DEL REAL
LOS PERSONAJES
NADINE SIERRA, soprano
UN RELOJ QUE MARCA EL TIEMPO
PARA HACER DETERMINADAS COSAS
Violetta es un papel que, al ser tan socorrido por cantantes, parece fácil, pero según los musicólogos y cantantes no lo es. Nadine Sierra lo interpreta en esta versión, y para ella es un gran placer forma parte de esta producción.
Hace poco que cumplí 37 años y es curioso de que Willy Decker haya hablado de ese Reloj, que inexorablemente marca el tiempo que pasa. Yo conocí esta producción, pero primera vez, en 2007 y ahora, en este momento de mi vida en que soy una mujer más madura, una mujer soltera que no tiene hijos, puedo plantearme este paralelismo entre ese reloj, ese tiempo que transcurre inexorablemente, y el Reloj que también transcurre para mí en mi vida personal. Llegada a mi edad, una puede preguntarse cuándo debe hacer las cosas que quiero hacer en mi vida personal o realmente también se me está acabando a mí, como a Violetta, el tiempo, no el tiempo de vivir, pero sí el tiempo de hacer determinadas cosas, antes de perder la juventud.

FOTO: JAVIER DEL REAL
LA DIFERENCIA ENTRE LO QUE IMPORTA
Y LO QUE ES UNA MIERDA
Por todo ese sentimiento del tiempo que se acaba le lleva a Nadine a una gran emotividad.
El sentimiento de dolor que se refleja durante toda la obra, muestra muchas incomprensiones y, entre otras, la diferencia entre lo que realmente importa y lo que es una mierda. Agradezco mucho a Wily Decker que me haya ayudado a entender a este personaje, a sentir quién es, en realidad, Violetta y cómo piensa. Todos podemos identificarnos con este personaje y no solamente las mujeres. Es verdad que las óperas son especialmente melodramáticas, y cuentan historias inverosímiles, pero si nos quedamos con el fondo de la obra, vemos que está muy cerca de nosotros. Esto me ha ocurrido, no sólo como cantante. Yo siempre he querido ser cantante de ópera desde los 12 años. Me enamoré de la ópera, no por cantar, sino porque siempre quise ser actriz, artista. Para mí es superimportante ofrecer al público algo mucho más que bien cantado. Algo verosímil con lo que todos pueden identificarse. Que salgamos siendo distintos al ver una ópera. Por eso quiero agradecer esto al director. Es verdad que hay producciones que no se da en el clavo, pero esta vez hemos dado en el clavo.
XABIER ANDUAGA, tenor
LA PRIMERA VEZ QUE ME CREO
EL PAPEL DE ALFREDO GERMONT
Xabier Anduaga encarna a Alfredo Germont, un papel con el cual el espectador litiga porque le desconcierta. Xabier reconoce que es un papel ingrato en muchas producciones, aunque todos los papeles siempre tienen algo que decir
En este caso tiene la oportunidad de ser diferente. He interpretado muchas veces a Alfredo, y ésta es la primera vez que me creo de verdad el papel gracias a Willy. De Alfredo destacaría el comienzo del segundo acto en que Violetta y Alfredo no le hacen caso a la realidad. Son felices como si fueran dos chavales adolescentes, que se quieren sin pensar en lo que vendrá.

FOTO: JAVIER DEL REAL
LO QUE NADINE TRANSMITE EN EL ESCENARIO
HACE QUE TÚ SEAS UN ARTISTA DIFERENTE.
Xabier da las gracias a todos, pero en especial a Nadine Sierra.
Lo que Nadine transmite en el escenario hace que tú seas un artista diferente. Yo soy un artista más joven, con menos experiencia, pero cada vez que tengo la oportunidad de cantar y trabajar con ella, siento que crezco y esto es gracias a ella. En esta ocasión con Violetta, que es un papel que desde que sale y se va es Violetta, hace que yo pueda hacer un Alfredo más de verdad, y por mucho que sea ingrato lo que canta, para mí es precioso. No hay una frase que cante Alfredo que no sea bonita, pero poder crear juntos y con el maestro momentos musicales tan bonitos, para mí, te crees a Alfredo, te crees a Violetta, y creas momentos de verdad, aunque los dos sepan que Violetta se va a morir desde el principio, pero no dejan de creer en el amor, y para mí es lo más importante y más bonito.
ACTIVIDADES CULTURALES EN TORNO A LA TRAVIATA DE WILLY DECKER
FUNCIÓN
De 24 al 29 de junio de 2025: 19:30 H
De 1 al 5 de julio de 2025: 19:30 h.
8 y 10 de julio de 2025: 19:30h
14, 16, 17, 19, 20, 21 y 23 de julio: 19:30 h.
PRECIO
Estreno: De 475 € a 22 €
Normal: De 359 € a 18 €
Título: La Traviata (Ópera en tres actos)
Música: Giuseppe Verdi (1813-1883)
Libreto: Francesco Maria Piave, basada en La dama de las camelias, de Alexandre Dumas hijo
Estrenada en el Teatro La Fenice de Venecia el 6 de marzo de 1853
Estrenada en el Teatro Real el 1 de febrero de 1855
Producción: Dutch National Opera & Ballet
Escenografía y vestuario: Wolfgang Gusmann
Vestuario: Susana Mendoza
Iluminación: Hans Toelstede
Coreografía: Athol John Farmer
Reposición de escenografía: Thomas BrunerCoro y Orquesta Titulares del Teatro Real
Intérpretes:
Violetta Valéry: Nadine Sierra (24, 27, 29 jun; 2, 5, 8, 14, 17, 20, 23 julio) / Adela Zaharia (25, 28 junio; 1, 4, 10, 16, 19, 21 julio) / Flora Bervoix: Karina Demurova
Annina: Gemma Coma-Alabert
Alfredo Germont: Xabier Anduaga (24, 27, 29 junio; 2, 5, 8, 16, 19, 23 julio) / Iván Ayón Rivas (25, 28 junio; 1, 4, 10, 21 julio / Juan Diego Flórez (14, 17, 20 julio)
Giorgio Germont: Luca Salsi (24, 27, 29 junio; 2, 5, 8, 14 julio) / Artur Rucinski (25, 28 junio; 1, 4, 10, 16, 19, 21 julio) / Gëzim Myshketa (17, 20, 23 jul)
Gastone, vizconde de Létonières: Albert Casals
El barón Douphol: Tomeu Bibiloni
El marqués de Obigny: David Lagares
Doctor Grenvil: Giacomo Prestia
Giuseppe: Joan Laínez
Dirección del coro: José Luis Basso
Dirección musical: Henrik Nánási / Francesc Prat (1, 10 julio)
Dirección de escena: Willy Decker
Duración: Acto I: 32 minutos / Pausa: 25 minutos / Actos II y III: 1 hora y 38 minutos
Estreno en Madrid: Teatro Real (Sala Principal), 24 – VI – 2025

TEATRO REAL (SALA PRINCIPAL)
Director: Joan Matabosch
Plaza de Isabel II s/n. Centro
28013- Madrid.
Tf. 900 244 848
Metro Opera y Sol: L. 1,2,3,5 y Ramal
Bus: Plaza de Isabel II: líneas 3, 25 y 39; Sol: líneas 5, 15, 20, 50, 51 …