El director francés Mohamed El Kathib, reconocido internacionalmente por sus piezas de teatro documental, viene a los Teatros del Canal con un programa doble: Finir en beauté en el Estudio 1 del Centro Danza Canal, y C’est la vie en la Sala Sala Negra. Se trata de dos obras sobre el Duelo: la muerte de su madre y la muerte de un hijo. Las dos obras que se presentan proceden, en su origen, de sendas conversaciones. Finir en beauté reconstruye un documento escénico a modo de diario escrito a partir del día en que murió su madre. C’est la vie habla a través de dos intérpretes de la muerte de sus propios hijos en una experiencia al tiempo íntima, estética y política, para no más de 100 espectadores. MOHAMED EL KHATIB
Mohamed El Khatib (Loiret, Francia, 1980), ha declarado con respecto a sus escritos que “Desde hace algunos años soy incapaz de disociar mi escritura de lo real”. Siempre interesado en el documento como activo escénico, como herramienta. El trabajo de El Khatib se mueve en las fronteras y gusta de unir texto, instalaciones, películas y periódicos para observar las fricciones que se producen en los límites. Se formó en literatura y se doctoró con una tesis sobre la crítica en la prensa francesa. En 2008 fundó el colectivo Zirlib con un simple postulado: la estética no debe estar privada de sentido político. Ha investigado sobre la escritura de lo íntimo. En 2014-2015 fue artista asociado del Centre Dramatique National Orléans/Loiret/Centre. Otras obras suyas son: Stadium y Moi, Corinne Dadat. ***** FINIR EN BEAUTÉ
Finir en beauté es una obra reconstruida mediante entrevistas, emails, textos, documentos administrativos y otras fuentes que parten de hechos reales.En este caso la muerte de su madre le lleva a contarnos una historia de un duelo. Mohamed precisa que La creación que surgía de aquel proceso de investigación intentaba explorar las modalidades de diálogo que surgen de la noción de ‘escombros’: escombros de una relación, de una historia, de un paisaje, de todo lo que quedaba de una madre y un hijo después de la muerte de la primera. El Khatib reconstruyó una especie de diario escrito a partir del día que murió su madre. Comenzó un trabajo de inmersión en la memoria para volver a visitar lugares y espacios de su vida. Y todos esos recuerdos cobran vida en escena sin intermediarios entre el autor, su vida, su escritura y el público. La narración va dirigida directamente al espectador en un escenario vacío y la actriz principal sigue siendo la madre ausente. La obra nació en un trabajo en residencia en el teatro L’L de Bruselas donde El Khatib desarrollaba una investigación en torno a la escritura de lo íntimo y el análisis del trasvase de su lengua materna (el árabe) al lenguaje teatral, en base a entrevistas realizadas a su propia madre. Cuando muere su madre de cáncer en 2012, surge la fusión de vida y de teatro, creando un nuevo estilo. Finir en beauté se estrenó en Marsella y más tarde en el Fringe de Avignon. Obtuvo el Gran Premio de la Literatura Dramática de Francia, el cual le llevó a un reconocimiento internacional. Su consagración llegó en 2017 con el ciclo que le dedicó el Festival de Otoño de París. FUNCIÓN PRECIO Título: Finir en beauté ***** C’EST LA VIE
C’est la vie procede de una conversación dos actores sobre la muerte de sus hijos en 2014 en diversas circunstancias. Fue una experiencia dolorosa. La premisa que plantea Mohamed es Si muere tu marido o tu mujer, te quedas viuda o viudo. Si mueren tus padres, te quedas huérfano. Existe una palabra. ¿Y si quien muere es tu hijo? Seguimos pensando que es antinatural que un hijo muera antes que sus padres, pero pasa constantemente y todavía no hemos inventado un término. La documentación previa en este caso los testimonios de aquellas personas que habían perdido un hijo, desde Víctor Hugo a Zidane. Sin pretenderlo se topó con Fanny Catel y Daniel Kenigsberg, dos actores con los que había querido trabajar antes sin fortuna. Fanny (37 años), pequeña y delgada, había perdido a una hija de tan solo 5 años. Daniel (61 años), actor alto y corpulento, al final de su carrera. Su hijo se suicidó con 25 años. Mohamed les sugirió que le dijeran por lo que estaban pasando y así comenzó este experimento límite. Después de horas de entrevistas, testimonios, e-mails y documentos administrativos, devolvemos la crónica de dos muertes anunciadas». Fanny y Daniel frente a frente en un dispositivo escénico desnudo donde no más de 100 espectadores viven el relato con la mayor proximidad posible a los actores. Una experiencia íntima, estética y política. FUNCIÓN PRECIO Título: C’est la vie
(Información del Departamento de Prensa de los Teatros del Canal)
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