Alicia y Héctor, una ex pareja divorciada desde hace tiempo, se encuentran para hablar de los desajustes emocionales de su hija. De fondo el Jueves Santo de Sevilla, en primer plano el relato de la vida familiar de un matrimonio repleto de altibajos, en el que la profesión de ambos ocupó la mayor parte del tiempo compartido. Los dos protagonistas disimulan su sentido de culpa en un tira y afloja de reproches que culmina con el descubrimiento de un hecho que nunca se debería haber producido.
RAQUEL PÉREZ, Alicia Para informar de cómo surge este montaje, lo lógico es que nos lo comunicara Ignasi Vidal, su autor. No obstante Ignasi pasa la pelota a Susana Hornos, la directora, Susana se lo pasa al actor Nacho Gerreros, pero la pelota termina en manos de la actriz Ráquel Pérez. Todo empezó una tarde cuando y o estaba en mi casa tan tranquila y me llamó Ignasi Vidal. Me dijo:«Tengo un texto que he ofrecido a unas cuantas actrices veteranas y ninguna se ha atrevido a hacerlo«. Ante esa premisa ¿qué actriz no se pone nerviosa?«Me han dicho que tú lo puedes hacer». Lo leí y me puse, no nerviosa sino muy cachonda, esto está feo decirlo, pero la verdad es que es un texto que tiene que tener todo lo que tiene un texto para que una actriz quiera hacerlo: drama, comedia, intensidad, sexo, tiene….¡todo! Aunque Ignasi no se acuerda de lo que ha escrito, porque hace mucho tiempo, tiene de todo. Quise hacerlo, y empezamos el movimiento de levantarlo. Llamé a Nacho, le gustó y buscamos a Jesús y luego a Susana. En medio vino la Pandemia
NACHO GUERREROS, Héctor A Nacho Guerreros el gran público lo conoce por las series televisivas Aquí no hay quien viva y La que se avecina. En teatro fue un bombazo Juguetes Rotos (CLICK) que aún sigue de gira. Ignasi Vidal había visto Juguetes Rotos (CLICK) o un «working progress» (trabajo en marcha) que hicimos, y ahí es donde me conoció y le pareció bien la elección de Raquel. Yo feliz, porque me llamó mucho la elección de este texto porque lo tiene todo para atrapar al espectador y tiene todo para atrapar al actor. Si a un actor, por lo menos a mí me pasa, no me atrapa, soy incapaz de representarlo. Aquí reunía las condiciones necesarias para que nos involucrásemos en este proyecto, que además es bastante violento. Es una obra que es violenta de representar, y violenta también para el espectador. Ya la hemos estrenado y tengo una anécdota de una señora en Granada que llevó a su hija de 13 años y me dijo: «¿Qué bien que puedo traer a mi hija para que vea esto, porque esto es necesario que lo contéis». No cuento lo que sucede para no hacer «spoiler», pero el centro es una hija, aunque nunca sala a escena. A esta hija le ocurre algo que hace que todo explote por los aires. Ahora que lo cuente Ignasi que es el que lo ha escrito.
SUSANA HORNOS, la Directora Ignasi le pasa la pelota a Susana Hornos, la directora. Esta obra está ligada a muchas casualidades. Conocí a Ignasi en Buenos Aires. Estaba con su obra Dignidad. Yo vivía en Buenos Aires donde he vivido casi 20 años. Conocí a Nacho por Juguetes Rotos (CLICK), y así empezó nuestra amistad. Cuando Nacho me convoca para hablarme de la obra de Ignasi, era como ¡Wahhh!, los océanos se volvían a cruzar en mi vida. Me pasó como a ellos. Lees un texto y ves que solamente dos personajes en escena recorren un arco emocional en años de vida; tocaba la profesión…, no estoy de acuerdo con lo que dicen de los actores, pero eso es lo maravilloso también, el que da para todo: una charla después, un vinito, preguntarse cosas, da para mucho la función. Ojalá que el público la disfrute desde ahí. Nosotros la hemos disfrutado en su recorrido: vamos a jugar por aquí, vamos a jugar por allá. Ignasi nos ha permitido eso. QUE LAS COSAS SALGAN DESDE EL INSTINTO En cuanto a la dirección de los actores, pone de antemano que cuando llegas de un país diferente, el lenguaje que hablas es otro, y lo que siempre se da es un período de adaptación entre unos y otros. A Nacho le conocía como actor por Juguetes Rotos (CLICK), con Raquel no nos conocíamos, entonces yo quería que estuviera aquí lo que yo he «mamao» en Argentina, que tiene que ver con la verdad, con lo orgánico, que las cosas salgan desde el instinto y no salgan desde la marca y la declamación. Ésta ha sido nuestra búsqueda. Toda la verdad que ya tenían los personajes en el texto tenían que ser capaces de llevarla a escena. Justamente, como decía Raquel y Nacho, pasan por todo, como es cuando Raquel dice «No puedo vivir sin esta profesión (la de actriz), y no puedo vivir con ella» es algo que, creo, que no hay actor ni escritor, ni director que no nos toque tan de lleno, y seguramente al público le pasará continuamente. Hay uno un día, en su profesión, que dice «es que no puedo más». Si no eso no es de verdad, y si eso no te está pasando en el momento, la función queda en otra cosa. Desde la dirección ese era mi objetivo: que todo lo que pase, pase de verdad. Teniendo a Nacho y Raquel, esto se fue dando con sencillez.
IGNASI VIDAL, el Autor Por fin la pelota cae en manos de Ignasi que ante la filosofía del teatro como juego, sólo le queda exclamar ¡Qué remedio! Yo soy el autor y tengo poco que decir, además con el peligro de destrozar mi propia obra si hablo mucho de ella. Sí, han sido toda una serie de casualidades. Verla ahora en pie me parece un milagro. No quería desvelarlo, pero, sí, hubo varias actrices antes, pero hubo una concretamente muy conocida que nunca desvelaré su nombre, que después de leer el texto me llamó. Quedamos para tomar un café y me dijo que el texto le había encantado, era un texto maravilloso, pero que ella no iba a hacer «eso». «Yo no voy a hacer eso. lo siento, pero no puedo hacer eso. Me encanta que hayas pensado en mí, pero no quiero meterme en ese marrón. Encontrarás muchas actrices». Con Raquel había sido compañero en una serie de televisión y conocía su inmensa realidad como actriz, así que…A Nacho lo conocía en una muy primigenia función sin terminar de Juguetes Rotos (CLICK) y me pareció un tándem buenísimo. Después de escucharlos en la lectura «¡Adelante!»y ya armaron todo. El texto lo escribió en el 2015. A la queja de Susana Hornos, Ignasi precisa Tampoco yo pienso eso sobre la profesión…o ¿Sí? Yo escribo según lo que se me da, pero también los personajes tienen su propia opinión sobre el mundo, sobre la vida, y generalmente no todo lo que dicen me parece bien. Con este texto pasé por diferentes estados, porque la protagonista es la hija de ellos dos. Es una pareja que se reúne para hablar de un problema grave de su hija. Al escribirla hubo momentos en que me sentía mal. Entonces pensé«si me siento mal es que funciona, alguien más se sentirá mal». Cuando pasa tanto tiempo desde que lo escribí, la función deja de ser tuya. Les estaba escuchando en el pase gráfico a la prensa, y me sentía sorprendido. Soy un mero espectador. Tengo muy poca opinión. Tras el estreno veré si me gusta más o menos como a cualquier espectador. Escribir es eso, desprenderte de tu obra. Lo que tengo que decir es que ellos son unos magníficos profesionales
FUNCIÓN PRECIO Este espectáculo está acogido al Joven Bono Cultural. JOBO y ven gratis Título: Sobre el caparazón de las tortugas
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