LUCÍA ÁLVAREZ “LA PIÑONA”, bailaora
Lucía Álvarez “La Piñona” (Jimena de la Frontera, Cádiz), siendo una niña, se forma en varias academias de baile de El Campo de Gibraltar. Con 17 años amplia su formación en Granada, y un años después se afinca en Sevilla para iniciar los estudios en la Fundación de Arte Flamenco Cristina Heeren, donde recibe clases de maestros como Milagros Mengíbar, Rafael Campallo o Carmen Ledesma, entre otros, y paralelamente se sigue formando junto a figuras del baile como Andrés Peña, Eva Yerbabuena, Rubén Olmo o Andrés Marín. Su carrera profesional la comienza primero en los tablaos sevillanos El Arenal y Los Gallos, y después en los principales tablaos nacionales, como El Cordobés de Barcelona o los madrileños El Corral de la Morería y Villarrosa, hasta que en 2009 se alza con el Primer Premio de la Federación de Entidades Flamencas de Sevilla y en 2011 con el Premio Desplante del 51 Festival Internacional de Cante de Las Minas de La Unión (Murcia), sin duda uno de los reconocimientos más prestigiosos del mundo jondo. A partir de ahí, la artista participa como primera bailaora en el espectáculo Tierra Lorca que representa el Ballet Flamenco de Andalucía en el Generalife de Granada y colabora con grandes nombres del flamenco recorriendo los festivales más importantes del mundo UNA BAILAORA NO CONVENCIONAL Lucía Álvarez “La Piñona” no es una bailaora convencional. Lo demostró hace tres años, cuando pisó por primera vez el escenario de Flamenco Real y, ahora, con su nuevo espectáculo Desvaríos, desplegará un abanico de emociones con su arte personalísimo.
Sin influencia de tendencias o modas, sin exhibición banal de su excelente técnica o necesidad perentoria de trascender, La Piñona se mueve con libertad tanto en la ejecución de la danza, como en la creación de sus coreografías. Sobre las tablas quiere contar experiencias, vivencias y sentimientos, lo que la vida va transformando dentro de ella misma. Desvaríos es un punto de partida, un proyecto abierto en el que va explorando su baile y sus límites, llevando el cuerpo tanto a su máxima expresión como al vacío absoluto, desde lo sensorial, lo intuitivo. Los «desvaríos» son piezas que van cambiando y mutando según lo hace la bailaora, así, cada «desvarío» es único e irrepetible. Esta propuesta apuesta por lo sencillo. Es salvaje, natural. Más que enseñar, es compartir un viaje por los sentidos, por el cuerpo y por el espacio de artistas y público. La Piñona comparte Devaríos con tres excelentes músicos: Ezquiel Montoya y Jesús Corbacho en el cante, y Ramón Amador en la guitarra. UN PROCESO CREATIVO EN PROGRESIÓN Estos Desvaríos nacen como parte del proceso creativo de su último trabajo Insaciable, “un destape emocional, corporal y artístico” en el que hurga en sí misma para exponerse tal y como es y que llevará durante este 2023 y 2024 a los principales escenarios y festivales flamencos nacionales e internacionales. Tras recibir en 2011 el Desplante en el 51 Festival de La Unión (Murcia), así como el Primer Premio de la Federación de Entidades Flamencas de Sevilla en 2009, la bailaora impulsa su carrera en solitario recibiendo el aval de la crítica y del público gracias a propuestas como Emovere, estrenada en el Festival de Jerez y con la que obtiene una candidatura en los premios MAX y dos nominaciones a los Premios LORCA; Recital, estrenada en el Festival Flamenco de Toulouse (Francia); Abril, que presentó en la Bienal de Flamenco de Sevilla 2020 y en el 2022 Festival de Jerez con excelente acogida y el más reciente Insaciable, que llevará este 2023 y 2024 por los principales escenarios y festivales flamencos nacionales e internacionales. Además de proyectos diversos como la performance Flamenco Experimental. Rosario Escudero de Pedro G. Romero que desarrolla en museos. Ahora, será el Salón de Baile del Teatro Real el escenario de esta nueva propuesta tan diferente como ella, Desvaríos.
FUNCIÓN PRECIO Título: Desvaríos
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